El cardenal y presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Juan José Omella, ha defendido que las iglesias permanezcan abiertas durante la crisis del coronavirus y pese al cierre de templos en Roma.
Omella ha asegurado en una entrevista en RNE que "Tener las iglesias abiertas, a menos que Sanidad diga lo contrario, para que la gente pueda ir a rezar, sin aglomeraciones", además ha añadido que le parece "una medida de cierta esperanza"
"A DIOS ROGANDO Y CON EL MAZO DANDO"
En este sentido, el presidente de la CEE ha recordado que "Dios ha tenido su parte en las grandes epidemias" y ha añadido que, "por una parte, a Dios rogando y con el mazo dando, porque hay que aplicar las reglas de la prudencia, pero, por otra, dejar que el corazón pueda explayarse pidiendo a Dios ayuda".
El cardenal ha mostrado la voluntad de la Iglesia de colaborar en todo con el Ministerio de Sanidad en materia de prevención y ha recordado que las homilías pueden seguirse por televisión y radio. Ha indicado, no obstante, la posibilidad de celebrar misas reducidas "con todas la prudencias" en las que "se de la comunión en la mano y no en la boca y no darse la paz", pero ha defendido la necesidad de "ir abriéndose cada vez más a las indicaciones del Ministerio de Sanidad".
En cuanto a la celebración de funerales o catequesis ha reconocido la necesidad de "regularlo mucho" para evitar que se "conviertan en un foco de contaminación". Ha recordado, no obstante, que la situación no es la misma en todas las regiones a la hora de adoptar medidas.
DIÁLOGO CON EL GOBIERNO
Sobre una posible suspensión de los actos religiosos de la Semana Santa, Omella se ha mostrado prudente. "Vamos a ir viendo; tenemos que ir respondiendo a cada momento, porque esto es un 'sinvivir' y cada media hora nos van diciendo nuevas indicaciones".
Por último, Omella ha hecho mucho hincapié en el diálogo con el Ministerio de Sanidad, a disposición de quien ha puesto los hospitales gestionados por la Iglesia en caso de saturación de la sanidad pública. "Entre hospitales públicos y privados siempre ha habido acuerdos y en una epidemia todavía más", ha indicado.