Casi todas las paradas de alimentación de los mercados municipales continúan abiertas. El gerente del Institut Municipal de Mercats, Màxim López, calcula que un 85% de los comerciantes de alimentación está funcionando con normalidad. Solo los tres equipamientos de la ciudad que no son alimentarios -los Encants de Glòries y los mercados de ropa y del libro dominical de Sant Antoni- están cerrados. También han tenido que bajar la persiana los comercios de productos que no son para comer que están en los mercados. En el conjunto de Barcelona, la venta online y a domicilio se ha multiplicado por 10 en todos los mercados.
López explica que los primeros días, tras ser decretado el estado de alarma, los mercados de Barcelona vivieron un importante incremento de ventas. "Muchos ciudadanos hicieron un acopio de productos frescos. Tras esos días, como es normal, el flujo de clientes bajó. Ahora, la situación se ha normalizado. El abastecimiento está garantizado tanto por parte de Mercabarna como de otros mayoristas", subraya el gerente de los mercados municipales.
VIERNES Y SÁBADOS
En todos los equipamientos, las ventas se concentran los viernes y los sábados, y por las mañanas. "Es lo normal en un estado de confinamiento". "Hemos contratado a 55 personas que durante los viernes por la tarde y los sábados por la mañana garantizan que se respeten las distancias entre las personas y ordenan las colas", añade la regidora de Hacienda, Comercio y Mercados, Montserrat Ballarín. Según el gerente, ahora los comerciantes ya cuentan con material de protección -guantes o mascarillas-, aunque reconoce que los primeros días faltó. "Los protocolos de higiene y seguridad se están aplicando correctamente".
Las ventas que más crecen son las online y a domicilio. "En los dos casos, el número se ha multiplicado por 10 en comparación con antes del confinamiento", afirma López. En la venta a domicilio, el cliente la puede hacer directamente con su vendedor de confianza, por ejemplo por vía telefónica, pero 21 mercados ya tienen este servicio centralizado y entregan el género ellos mismos o través de empresas de inserción. La venta online no está tan generalizada, pero paradas de 12 equipamientos de la ciudad ya la tienen, según el gerente, aunque en la web municipal solo aparecen dos, Santa Caterina y Clot.
50 DE LAS 200 PARADAS EN LA BOQUERIA
Los mercados que peor lo están pasando son los que dependen de los turistas. Es el caso de la Boqueria, Santa Caterina y Barceloneta. "Es donde se ha notado un mayor descenso de las ventas". En la Boqueria, por ejemplo, el mercado más conocido de Barcelona, solo están abiertas 50 de las 200 paradas, todas de alimentación. "Aquellos que vendían más a restaurantes o turistas, han perdido ventas", precisa Ballarín. "La Boqueria vuelve a ser estos días un mercado de barrio y de proximidad. Todos los clientes son vecinos", subraya López. Recientemente, el presidente de Amics de la Rambla, Fermín Villar, decía que todas las paradas enfocadas al turismo estaban cerradas.
El gerente afirma que de los 38 mercados de la ciudad ninguno ha cerrado por el virus de Wuhan. Tampoco se ha tenido que confinar a gente. Algún comerciante se ha encontrado mal, pero no se ha podido comprobar que estuviera contagiado por Covid-19. "Si tienes síntomas leves y no vas al hospital es difícil saber si es coronavirus o un proceso gripal. Esta persona se ha quedado en su casa hasta que se ha recuperado", añade López. Y hay que suponer que tanto él como sus allegados habrán hecho el confinamiento decretado por las autoridades sanitarias.