La isla de La Graciosa es uno de los pocos sitios de España sin contagios de Covid-19. Los 700 habitantes de la nombrada como octava isla canaria han tenido la suerte de esquivar, de momento, esta pandemia global que tanto sufrimiento y dolor está dejando por allí por donde pasa.
Pero, a pesar de las circunstancias e igual que sucede en el resto del país, sus residentes mantienen el aislamiento. Se trata de una situación sorprendente y preocupante para todos ellos porque esta isla recibe a unos 25.000 turistas cada año.
CONTÍNUO CONTACTO CON LANZAROTE
El hecho de que se trate una isla y de que tenga censados a unos 700 habitantes lógicamente ha contribuido, pero lo más interesante de todo es que La Graciosa estuvo recibiendo turistas hasta la declaración del estado de alarma.
Además, también ha mantenido hasta el momento el contacto diario con Lanzarote, lugar donde se desplazan sus trabajadores esenciales y de donde proceden los productos que consumen los gracioseros.
MUCHO MOVIMIENTO
“A finales de febrero mi familia estuvo en Sevilla, yo viajé a Barcelona… y aquí ha venido cantidad de peña”, comenta Miguel Páez, animador sociocultural y dueño de Gracioserito, mitad tienda de souvenirs mitad proyecto a través del cual cuenta la historia de la isla a sus visitantes, al diario digital Huffington Post.
“En los últimos tres meses ha viajado mucha gente de y hacia la isla, pero nunca se han registrado contagios”. Aunque, al mismo tiempo, también admite que ha sido una cuestión "de azar, de suerte”.