La crisis desencadenada por el coronavirus ha hecho que muchos bares y restaurantes de Barcelona se replanteen su continuidad, e incluso que se vean obligados a bajar las persianas para siempre. Tinta Roja, un emblemático bar situado en el barrio del Poble-sec, fue uno de ellos, pero gracias a la solidaridad de los barceloneses se ha podido mantener a flote.
El dueño del característico local que “transporta a una mezcla de viejo Teatro de Varieté, Café Teatro, Milonga de Tango y museo de cera” donde cada semana ofrecen actos de muy diversa índole: teatro, improvisación, conciertos, poesía, danza, stand up, y exposiciones, se vio obligado a cerrar y cancelar todos los eventos, con las serias dificultades económicas que ello suponían para la viabilidad y del bar. Es por ello que surgió la idea del crowdfunding.
UNA CAMPAÑA VIRAL
Manuel, el gerente de Tinta Roja no podía imaginarse cuando lanzaron la campaña que en menos de un mes conseguirían dar la noticia de la reapertura. El crowdfunding, aún activo, se hizo viral rápidamente a través de las redes sociales y hasta la fecha ha recaudado más de cinco mil quinientos euros. Un dinero que, a pesar de no solventar por completo los problemas, ha permitido que el dueño del local así como sus camareros y artistas vuelvan a decir: “se abre el telón”.
Una campaña de recaudación de fondos de la plataforma GoFundMe y la solidaridad de cientos de donantes ha cambiado la suerte del bar. “Tinta Roja volverá a abrir esta semana, para seguir ofreciendo un espacio de arte, teatro y encuentro, manteniendo el ambiente mágico que con todos vosotros es posible crear”, han explicado en una actualización informativa del propio crowdfunding.