El Ayuntamiento de Barcelona dejó de enviar el 6 de julio las cifras del seguimiento de casos positivos y agentes confinados a los sindicatos de la Guardia Urbana. Desde CSIF acusan al gobierno de Ada Colau de falta de transparencia y reclaman que los trabajadores tienen "derecho a la información" como señala la lee de prevención de riesgos laborales.

Este sábado se conocía que un tercer urbano de las unidades de la playa de la Barceloneta se ha contagiado. Se trata del tercer policía que ha dado positivo. Según la cronología del caso relatado por el consistorio hacia sus trabajadores, el funcionario trabajó del 3 al 9 de agosto. El día 4 se había desinfectado la comisaría del paseo de Joan Borbó tras detectarse otro positivo. 

Sapol, otro sindicato policial, pedía este sábado el cierre de esta comisaría conjunta de la Urbana y Mossos d'Esquadra. Los trabajadores de esta agrupación también han criticado la gestión del gobierno municipal. Una preocupación que también han mostrado este domingo los representantes de UGT del cuerpo que se han desplazado hasta la oficina policial. En un mensaje en Twitter han pedido mejorar los protocolos de seguridad y la comunicación preventiva.

21 TEST

El Ayuntamiento realizó 21 test serológicos el viernes 7 de agosto con resultado negativo en todos los casos. Por recomendación de Quirón Salud, se indicó al agente en cuestión confinamiento durante 14 días y la baja laboral. El día 7 el agente se hizo una prueba PCR en su centro de salud y dio positivo. La Urbana activó un proceso de nebulización en la comisaría. 

Eugenio Zambrano, portavoz de CSIF, asegura que "debido a la mala política de prevención del Ayuntamiento estamos seguro que los casos seguirán aumentando el os próximos días". A Zambrano le preocupa que el cuerpo registre las preocupantes cifras de hasta 900 policías afectados por la Covid-19 durante las semanas más duras de la pandemia. 

PATRULLAS FIJAS

La asociación de trabajadores pide patrullas fijas (que las parejas de agentes no se vayan rotando) como medida de prevención para "minimizar el impacto del contagio". Fuentes municipales señalaban el viernes a este medio que el Ayuntamiento es el primer interesado en que no haya positivos en la Guardia Urbana. Las pruebas serológicas son habituales y los agentes están obligados a comunicar a sus superiores si tienen síntomas.

ÚLTIMOS DATOS

A fecha de 5 de julio y según el cuadrante del Ayuntamiento, 16 agentes habían dado positivo y 79 estaban en aislamiento. Desde CSIF denuncian la "relajación" del consistorio para proteger al cuerpo policial de los contagios. Señalan que los test rápidos no son fiables como lo demuestran los agentes afectados que, tras realizarse la prueba serológica, acuden al centro de salud donde la prueba PCR sí da positivo.

Noticias relacionadas