La consellera de la Presidencia y portavoz del Govern en funciones, Meritxell Budó, ha asegurado que el Ejecutivo catalán está estudiando la reforma del decreto 27/2020 para mantener el toque de queda y "abordar los retos de la pandemia sin la cobertura que da el estado de alarma", que previsiblemente finalizará el 9 de mayo.
FIN DEL ESTADO DE ALARMA
En la rueda de prensa telemática posterior al Consell Executiu, ha afirmado que el objetivo es tener un marco normativo que sea una "alternativa si se requiere alargar la medida, para que el Govern tenga forma de aplicarla", y asegura que la reforma del decreto estará listo de cara a la semana que viene.
La portavoz ha recordado una vez finalice el estado de alarma, las medidas que apruebe el Govern requerirán de la autorización del Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC), que tendrá un plazo de tres días para resolver desde que reciba la petición: "No podrá ser inmediato, la toma de decisiones se ralentizará".
PLAN DE DESESCALADA
Además Budó ha asegurado que en el momento en que los datos epidemiológicos lo permitan, el Govern abrirá "de forma inmediata y no tardará ni un día más" en relajar las medidas actuales por la pandemia.
Ha informado de que entre este miércoles y jueves el Procicat, junto con el gabinete de crisis por el Covid, acabarán de trabajar las medidas de cara a la semana que viene, ya que las actuales terminan el próximo lunes.
MEDIDAS ACTUALES
Budó ha insistido en que se avanzará en la relajación de las medidas vigentes cuando los datos epidemiológicos lo permitan, pero que por el momento es "preocupante" que todavía haya una ocupación de más de 500 camas de UCI por Covid-19.
"Los datos epidemiológicos están estabilizados, hay una tendencia a la baja que es una noticia positiva, ha disminuido la positividad de casos, algo que nos indica que nos podemos permitir ir relajando las medidas en los próximos días, pero el tema de las UCI es preocupante", ha añadido.