La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha presentado este sábado la Cuca de Llum, un flamante funicular que conecta la ciudad de Barcelona con el Parque del Tibidabo. El nuevo convoy, con más capacidad, velocidad y eficiencia, enlaza la plaza del Doctor Andreu con la montaña barcelonesa y su mítico parque de atracciones, el segundo más antiguo de Europa.
Hasta 252 viajeros podrán coger el funicular en cada viaje, el triple de personas que podía transportar el antiguo funicular. Hasta 1.200 personas podrían subir al parque cada hora. Colau ha inaugurado el nuevo medio de transporta un año y medio más tarde de lo previsto, ya que la pandemia pospuso los planes del consistorio.
UN 23% MENOS DE CONTAMINACIÓN
El Ayuntamiento quiere motivar a la ciudadanía a que use mayoritariamente este conexión ferroviaria en lugar del transporte privado. Según los cálculos del gobierno municipal, la Cuca de Llum reducirá en un 15% los desplazamientos en coche hasta la cima del monte. Con ello se reducirá un 23,2% las emisiones de CO2 hacia la atmósfera.
12 EUROS
El tren recorrerá los 1.150 metros que separan a la estación del funicular del parque, pero lo hará en la mitad de tiempo que hasta ahora. El convoy tardará tres minutos, lejos de los siete minutos que se prolongaba el viaje de los antiguos trenes de 1901, reformados luego en 1958.
La entrada del parque, más cara que antes de la pandemia, cuesta 35 euros para un adulto y en el precio está incluido la Cuca de Llum. El billete junior tiene un precio de 14 euros, el senior 10,5 euros y las personas con diversidad funcional pagan siete euros. El precio exclusivamente para subir y bajar de la montañana es de 12 euros