Ya no pueden más. Desde que en mayo terminó el toque de queda nocturno, los vecinos del Casc Antic de Barcelona, la zona delimitada por el barrio de Sant Pere, Santa Caterina i La Ribera, soportan prácticamente cada noche botellones, fiestas y grandes concentraciones que generan ruidos y suciedad. Una situación de la que dicen estar "hartos" y contra la que han convocado una manifestación el día 30 de junio.
Bajo el lema "basta de ruidos", la Associació de Veïns del Casc Antic se movilizará el próximo miércoles por la tarde. La marcha comenzará a las 18:00h en el paseo del Born y, tras un recorrido por el barrio, llegará a las 19:00h al cruce entre Via Laietana y la calle Princesa con la intención de cortar el tráfico para hacerse oír. "El vecindario contra los ruidos nocturnos en el barrio. ¡Defendamos nuestra salud", reivindica la entidad en un cartel que ya circula por las redes sociales.
En las últimas semanas, algunos vecinos han grabado con sus teléfonos móviles los actos de incivismo que se dan por las noches. Imágenes en las que se puede ver a dos personas orinando en la vía pública y un macrobotellón en el paseo del Born, que la asociación ha compartido públicamente este domingo con un mensaje dirigido a BComú y PSC, los dos partidos del gobierno municipal: "Nuestras calles y portales, los lavabos municipales. Nuestras noches, ruidos, aromas insoportables y desesperación. Sois ejemplo de una gestión desastrosa del espacio público".
"Basta de ruido. Ayuntamiento, ¿pensáis hacer algo? Ya no tenemos más paciencia. Queremos poder descansar, vivir con tranquilidad en nuestra casa, tener salud. ¿A vosotros os importa?", apelan de nuevo al gobierno de Ada Colau y Jaume Collboni.
LA BARCELONETA TAMBIÉN PROTESTA
Los vecinos de Sant Pere, Santa Caterina i La Ribera no son los únicos que están en pie de guerra contra los botellones y el incivismo. En los últimos días, La Barceloneta ha protestado contra el mismo problema en el barrio.
El pasado lunes, día 21 de junio, un cuantioso número de vecinos se manifestió en el Consell de Barri contra la gestión municipal frente estas conductas en la calle, denunciaron la suciedad y la inseguridad que sufren cuando se pone el sol y reivindicaron la necesidad de poder descansar por las noches.
Apenas tres días antes, el 18 de junio, organizaciones vecinales como Barceloneta diu prou, Plataforma en Defensa de La Barceloneta y la asociación de vecinos L'Ostia pidieron la dimisión de la alcaldesa, Ada Colau, por su "permisividad" con este tipo de actos.