Toque de queda nocturno en Barcelona de 1 a 6 de la madrugada. El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha anunciado este miércoles que el Govern ha aprobado decretar de nuevo encierro nocturno en 158 municipios de más de 5.000 habitantes con una incidencia acumulada de la pandemia igual o superior a los 400 casos diagnosticados por cada 100.000 habitantes [consultar aquí municipios afectados].
En el caso de la capital catalana, los datos publicados hoy por la Agència de la Salut Pública de Barcelona (ASPB) no son nada halagüeños. La velocidad de transmisión del coronavirus (Rt) ha bajado, pero se sitúa en 1,34. El índice de rebrote se coloca en 1.859 (86 menos). La incidencia acumulada en Barcelona es de 1379 por cada 100.000 habitantes, muy por encima del límite establecido por la Generalitat para librarse del toque de queda. En cuanto a contagios, en las últimas horas se han notificado 2.735 nuevos positivos. La cifra de personas ingresadas sube, con 47 más. En las últimas horas se han notificado cuatro muertes.
DURACIÓN
Lo ha explicado en una declaración institucional en la Generalitat tras la reunión extraordinaria de la comisión delegada del Govern sobre la pandemia, en la que han participado el vicepresidente, Jordi Puigneró, la consellera de Presidencia, Laura Vilagrà, el de Interior, Joan Ignasi Elena, y el de Salud, Josep Maria Argimon, además de la portavoz del Ejecutivo, Patrícia Plaja.
Una vez aprobada por el Govern, esta medida deberá ser ratificada por el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) para que se pueda aplicar en los municipios afectados. Aragonès espera que sea vigente a partir de este fin de semana y tenga una duración de siete días, aunque se podrían prorrogar en caso de que sea necesario por la evolución de la pandemia.
"DECISIÓN DIFÍCIL PERO IMPRESCINDIBLE"
El presidente ha alertado de que la situación sanitaria en Cataluña es "muy delicada" y por eso ve necesario aplicar este toque de queda nocturno para evitar las actividades sociales que, a juicio del Govern, cuentan con más evidencias de que facilitan la propagación de la pandemia.
Aragonès ha reconocido que es una medida difícil y severa porque limita un derecho fundamental como la libre movilidad, pero ha asegurado que es necesaria para frenar la tensión que el aumento de casos de Covid-19 está generando sobre el sistema sanitario: "Tomamos una decisión difícil pero imprescindible".
Ha añadido que el Govern ha optado por el confinamiento nocturno por responsabilidad, ha argumentado que se trata de una decisión meditada, razonada y con criterios objetivos, y ha advertido de que la toman para evitar que en el "futuro se tengan que tomar restricciones mayores que puedan tener un impacto más grande a nivel social, emocional y económico".
SEMANAS CLAVES
Ha insistido en que el toque de queda es complementario a las medidas anunciadas el lunes, que este mismo miércoles ha avalado el TSJC, y ha augurado que las próximas semanas serán claves para frenar esta nueva ola de coronavirus.
Además, ha hablado con alcaldes catalanes para compartir la preocupación sobre la evolución de la crisis sanitaria y la necesidad de aplicar estas medidas para proteger a la población, especialmente la de los segmentos de edad más vulnerables porque todavía no están del todo vacunados.
Aragonès ha garantizado que el Govern trabajará conjuntamente con los municipios afectados para afrontar esta situación: "La situación es difícil pero estamos a su lado y a su disposición para acompañarlos en el cumplimiento de la medida".