Vecinos y restauradores, cara y cruz del Primavera Sound

El Primavera Sound ha provocado posiciones opuestas entre vecinos y restauradores. Los residentes que forman parte de la asociación Movimiento Diagonal Mar han criticado este jueves el "ultimátum" que el festival ha dado al Ayuntamiento de Barcelona, y han mostrado su oposición a que se consolide un modelo de festival de mayor formato, con más número de días, artistas y público.

El Movimiento Diagonal Mar ha pedido que el festival sea más cívico y menos ruidoso. Hace unos meses, los vecinos calificaron la ampliación del festival a dos fines de semana seguidos de "disparate", y ahora consideran inviable alargar esa idea a ediciones futuras.

Respecto a las palabras de Gabi Ruiz, director del Primavera Sound que ha barajado la posibilidad de que la edición de 2023 no se celebre en Barcelona, la entidad las ha considerado como una "amenaza" al Ayuntamiento. Además, han confirmado que las reuniones en las que estaba presente el Primavera Sound se están celebrando y han defendido el compromiso y el papel de David Escudé, regidor de Sant Martí, en la gestión del evento.

LOS RESTAURADORES PIDEN LA CONTINUIDAD

El Gremi de Restauració de Barcelona ha reclamado que el Ayuntamiento adquiera un "compromiso claro y firme con la continuidad" del festival. El colectivo ha mostrado su apoyo y solidaridad con los organizadores del festival. "Eventos como este son un activo de nuestra ciudad que debemos conservar, cuidar y potenciar en la medida que sea posible", ha afirmado el presidente del gremio, Roger Pallarols.

Los restauradores han expresado una "profunda inquietud" sobre la posible marcha del festival, y han reclamado un cambio de actitud por parte de las administraciones hacia las actividades económicas.

Además, han reclamado al consistorio barcelonés y al festival que dejen de lado las desavenencias y retomen las conversaciones para que el Primavera Sound se pueda seguir celebrando en Barcelona.