Los Mossos d'Esquadra refuerzan los equipos de orden público en Cataluña para prevenir las fiestas masivas de fin de año. Quieren evitar una nueva rave como la de Llinars celebrada para celebrar la entrada de 2021 y queo acogió a centenares de personas durante más de dos días seguidos.
Los Mossos, la Guardia Urbana y las policías del Área metropolitana de Barcelona velarán por el cumplimiento del toque de queda, garantizarán el uso adecuado de los espacios públicos y las medidas de distanciamiento social durante la noche de Fin de Año.
En un comunicado han explicado que se han incrementado las patrullas de seguridad ciudadana y se han reforzado los equipos de orden público en Catalunya. Habrá 200 efectivos de Mossos d'Esquadra que realizarán 52 controles de alcoholemia y drogas en las principales vías catalanas.
107 POSITIVOS EN DROGAS
Desde la consejería de Interior han explicado que durante la campaña preventiva, que se realizó del 16 al 23 de diciembre, 204 conductores dieron positivo por alcoholemia, 10 personas se negaron a realizar la prueba y 107 dieron positivos en drogas.
El Servei Català de Trànsit (SCT) ha recordado que el consumo de alcohol y drogas y la conducción "son totalmente incompatibles", y que aunque se circule con una tasa de alcoholemia dentro de los márgenes legales permitidos, el riesgo de accidente se puede incrementar.