Más de 20.000 personas han visitado, entre los días 1 y 3 de abril, el salón de turismo B-Travel en Fira de Barcelona. Unas cifras que han superado las expectativas iniciales de los organizadores, aunque están todavía lejos de las más de 30.000 del año 2019, antes del impacto de la pandemia.
El congreso cierra puertas este domingo después de reunir a un cententar de expositores, la mitad de los previstos inicialmente, representando a más de 500 empresas del sector, todas las comunidades autónomas y 30 destinos internacionales. Entre estos, los que más interés han suscitado han sido los de proximidad dentro de Cataluña, los de Aragón, Andalucía, Canarias, La Rioja o la isla de Formentera y los de Brasil, Croacia, Cuba, Portugal y Marruecos.
Además, esta edición de B-Travel ha apostado también por potenciar el turismo sostenible y tendencias como el turismo rural o el slow travel, así como el conocido como turismo industrial, que pone en valor el legado de zonas industrializadas como atractivo turístico.
"EL 77% DE LOS VISITANTES HAN DECIDIDO AQUÍ SUS VACACIONES"
Después de tres días, y con la sensación de haber logrado un gran éxito de participación, Martí Sarrate, presidente del salón, se ha mostrado "enormemente satisfecho" y ha asegurado que “en B-Travel se ha puesto de manifiesto que, pese a las dificultades del momento, la gente tiene ganas de viajar”. Prueba de ello es que "el 77% de los visitantes han decidido aquí sus vacaciones”, ha afirmado antes de recordar que la próxima edición tendrá lugar del 10 al 12 de marzo de 2023.