Las obras de la reforma de la vía Laietana ya son una realidad. Los trabajos empezaron este sábado y los operarios han cortado alguno de los carriles. Desde el 10 de abril, los vehículos no podrán transitar en sentido montaña. Habrá un solo un carril ascendente entre Correos y Antoni Maura para llegar a los parkings de la Catedral y el mercado de Santa Caterina.
Los trabajos se prolongarán durante, al menos, dos años. El objetivo del Ayuntamiento de Ada Colau es pacificar de coches esta arteria principal en el centro de Barcelona. La oposición a este proyecto es contundente. Decenas de asociaciones, entre ellas de comercio y, prácticamente toda la oposición en bloque, rechaza esta medida.
POSIBLE COLAPSO
Muchos piensan que las obras colapsarán el tráfico durante los días laborables. Esta semana ya se han vivido grandes retenciones en el túnel de Glòries tras la puesta en marcha del carril de entrada a la ciudad.
Este jueves, el RACC advirtió de que cortar el tráfico en sentido ascendente en la vía Laietana "creará problemas" a la movilidad en el resto de calles de la ciudad. Josep Mateu, presidente de la entidad, también previó que se producirá un colapso en el paseo de Sant Joan y el Paral·lel. Y añadió más calles a una lista compartida por Narváez, entre ellas, la calle Marina.