Un esfuerzo colectivo de enorme trascendencia para el arte y para Barcelona. La Fundació Miró y el Museu Picasso preparan una exposición conjunta de los dos artistas para 2023 con la que quieren reflejar la amistad entre los dos pintores y el reconocimiento de la ciudad, dentro de la Celebración Picasso, por los 50 años de la muerte del artista malagueño.
El mundo artístico albergaba esa posibilidad, pero que no se ha podido concretar hasta ahora. Lo ha constatado el director de la Fundació Miró, Marko Daniel, en la presentación de la temporada para el próximo año. “Era evidente”, ha señalado, que esa exposición debía hacerse. Pero, ¿cuándo? El momento es el adecuado, se considera, dentro de los actos dedicados a Picasso. No hay precedentes sobre una exposición de ese calibre, aunque se organizó una menos ambiciosa en Sóller, en 2017.
Con la percepción de que Barcelona no goza de grandes exposiciones internacionales, la de Picasso y Miró pretende ser un acontecimiento cultural para la ciudad, que atraiga a visitantes internacionales, pero también, y de forma preferente, a los del conjunto de España.
La Fundació Miró expone ahora la muestra temporal Paul Klee y los secretos de la naturaleza. Y prepara la exposición Amigos imaginarios, entre el 16 de marzo y el 27 de julio, que acercará las prácticas artísticas contemporáneas a los niños a partir de instalaciones de artistas como Paola Pivi, Afra Eisma y Kasper Bosmans.
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Daniel ha explicado que la Fundació Miró ha trasladado el archivo de dibujos y documentación a su espacio original de la torre octogonal del museo y ha modernizado las instalaciones para adecuarlas a las necesidades de conservación. La fundación recuperará en 2023 el Premi Joan Miró, con la colaboración de la Stavros Niarchos Foundation, para reconocer a artistas que destacan por su espíritu de investigación, innovación, compromiso y libertad que caracterizaron a Miró.
Pero, ¿hay respuesta del público? En el caso de la Fundació Miró, que puede servir como termómetro, las cifras acompañan. Marko Daniel ha dado cuenta del número de visitantes en 2022. En los meses de octubre y noviembre se han superado los datos prepandemia y el público local ha crecido un 25%. La situación, a juicio de Daniel, “están bien encaminada” con el objetivo de atreverse ahora con grandes proyectos, como esa exposición conjunta entre Miró y Picasso.