"Sin sanidad estamos muertos y sin educación no hay futuro", así rezaba una gran pancarta desplegada en la céntrica plaza de Sant Jaume de Barcelona este sábado, sede del Ayuntamiento de Barcelona y del Palau de la Generalitat de Catalunya.

Más de un millar de profesores y sanitarios, según cifras del sindicato Ustec, se han concentrado este sábado ante ambas administraciones para reclamar un mejora de los servicios públicos catalanes en lo que supone una nueva jornada de pulso echado al govern de dos sectores tan estratégicos como hartos de sus condiciones laborales. Tabajadores de escuelas, centros de atención primaria y de hospitales se han congregado para reclamar "sueldos dignos" y mejoras para "un sistema sanitario desbordado y una atención primaria devastada", según ha explicado uno de los miembros de la Mesa Sindical de Sanitat, Christian Munné.

RECLAMACIONES

El objetivo de la que es la cuarta jornada de huelga de los profesionales públicos es la "equiparación de condiciones laborales dentro del sistema sanitario público, reducir la sobrecarga laboral, reducir la jornada laboral a 35 horas, y la jubilación a los 60 años".

"Se están priorizando cuestiones como la ampliación del Aeropuerto Barcelona-El Prat, el cuarto cinturón y el Hard Rock", criticaba la portavoz de Ustec-Stes, Iolanda Segura, quien ponderaba que "el dinero público hay que invertirlo en la ciudadanía".

Los médicos, manifestándose durante la tercera jornada de la huelga / EFE

Ambos colectivos han coincidido en señalar que, a nivel presupuestario, no supone ningún esfuerzo recuperar aquellos derechos que consideran perdidos y satisfacer las demandas propuestas en el seno de las negociaciones. Se trata, consideran, de una cuestión de "voluntad política".

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