Primer día sin mascarilla obligatoria en el transporte público

Desde este miércoles, 8 de febrero, la mascarilla ya no es obligatoria en el metro de Barcelona. La medida, tal como explicó el gobierno de Pedro Sánchez, deja de ser necesaria tras su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE). 

También se elimina la norma en el resto de transporte público: no será necesaria ni en autobuses, trenes ni tranvías –tampoco en ópticas, centros auditivos y ortopedias–. No obstante, desde el Ministerio de Sanidad siguen recomendando su uso y piden responsabilidad a la ciudadanía para que no haya un repunte de casos de coronavirus.

EXCEPCIONES

Tras la publicación de la nueva normativa en el Boletín Oficial del Estado (BOE), las mascarillas solamente van a ser obligatorias en los centros y servicios sanitarios como hospitales, centros de salud, clínicas dentales, centros de reproducción humana asistida, centros de interrupción voluntaria del embarazo y otros centros de atención especializada.

También se tendrán que usar en las farmacias y en las residencias, si bien en este último lugar sólo será obligatorio para los profesionales que trabajen en ellos siempre que estén en contacto con residentes y para los visitantes cuando se encuentren en zonas compartidas.

LLAMADA A LA RESPONSABILIDAD

 La situación epidemiológica del coronavirus ya está controlada y, según el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad (CCAES), Fernando Simón, esta retirada de la mascarilla implica que los ciudadanos tendrán que ser más responsables. 

"Cuando tenemos síntomas deberíamos utilizarla de manera responsable y si somos grupos de riesgo o vulnerables también. Hay que entender que nuestra salud afecta de alguna forma a la de los demás, sobre todo cuando hay una enfermedad infecciosa de por medio", ha añadido, dice Simón.

NUEVA NORMATIVA

Esta nueva normativa se produce casi un año después de que el uso de las mascarillas dejase de ser obligatorio en el exterior, medida aprobada el 10 de febrero, y unos meses más tarde, el 20 de abril, de que ya no se utilice en los espacios interiores.