Los españoles se vuelcan con los asuntos locales en los medios de comunicación

Los medios locales deberán seguir ofreciendo noticias y material de interés humano para satisfacer una demanda cada vez mayor. Los españoles se vuelcan con los asuntos locales en los medios de información, según una encuesta realizada por Metroscopia en colaboración con Foro Periodismo 2030 y la Fundación Axa, a partir de 5.000 entrevistas en todo el territorio español. Los asuntos locales suscitan el interés de hasta el 83% de los que se interan por un medio de comunicación.

Hay otras cuestiones que también logran el interés de los lectores, como la agenda y los temas de ocio locales, de una determinada ciudad. Ese porcentaje, entre los que afirman tener mucho o bastante interés es del 51%.

Es una de las conclusiones claras de la encuesta que sus responsables han presentado ese lunes en el Colegio de Periodistas, con la presencia de Fernando Jaúregui, presidente de Periodismo 2030, Sergio Martín, el director del Foro, Andrés Media, director general de Metroscopia y Gema Rabaneda, responsable de relaciones con los medios y reputación de la Fundación Axa.

CONTRA LA INFORMACIÓN GRATUITA

La encuesta ofrece las propias contradicciones que manifiestan los ciudadanos con otras encuestas. Una de las más conocidas, en los últimos meses, ha hecho referencia a la situación económica. Mientras se calificaba de mala o de muy mala, preguntados por la situación particular de cada uno, esa misma fotografía se señalaba como buena o muy buena. Lo mismo sucede con el consumo de medios de comunicación. Los medios escritos y digitales, junto a la radio, se presentan como los más fiables, los que dan más seguridad al lector, pero, en cambio, se consumen más las redes sociales y la televisión, que es el medio de comunicación preferido para informarse.

Jaúregui ha incidido en esas contradicciones, con la idea de que los lectores deben entender que la información “no puede ser gratis”. Y es que solo el 30% de los encuestados se muestra dispuesto a pagar por consumir un medio. El 9% de los españoles, siguiendo la encuesta, asegura que está suscrito a más de un medio de comunicación, mientras que el 15% asegura que se ha suscrito a uno.

Adolescentes usando sus móviles, en una imagen de archivo / EFE

Una de las características del lector de medios de comunicación en España es que desea ser entretenido. Quiere información, pero también entretenimiento. Ello explica, a juicio de Jáuregui y de Sergio Martín, que se dé más confianza a los medios escritos o a la radio, pero se consuman menos. “Hay cosas que entretienen, pero no ofrecen confianza, y así se señala, y se acepta”, admite Martín. Jáuregui completa el análisis: "Los medios informan y entretienen, y eso está bien, lo que no está bien son los medios de evasión".

En cualquier caso, lo que más se valora es el lenguaje y el tipo de comunicación que establece el medio con el lector o el consumidor. El 46% reclama una información “clara y precisa”, y solo un 40% cree que hay medios independientes. La confusión, en todo caso, es otra de las características, porque dos de cada tres españoles no separa la opinión de la información.

SER DESOBEDIENTE

Respecto a las diferencias entre comunidades autónomas, aunque la mayoría de los porcentajes sobre todas las preguntas son muy similares, destaca una distinción entre Cataluña y el resto de España. Confían en los medios, tanto privados como públicos, el 37% de los encuestados. Ese porcentaje cae al 29% en el resto de España.

Y, siguiendo esas contradicciones, el 83% de los españoles no acaba de saber diferenciar entre las informaciones fiables y las fake news. Hasta el 70% de los encuestados señala que “muy raramente” o “nunca” ha considerado como una información verdadera una que era falsa.

¿Cómo debería ser un nuevo medio de comunicación siguiendo todas esas respuestas? Ni Martín ni Jáuregui se han atrevido a apostar por determinadas recetas, aunque han destacado esa petición de información local. Martín, en todo caso, ha reclamado “un mayor atrevimiento, eso sí que lo pediría, o, dicho de otra manera, que se fuera un poco desobediente”.