La CSIF, el sindicato más representativo en las administraciones públicas y mayoritario en el cuerpo de la Guardia Urbana de Barcelona (GUB), ha remitido un escrito al nuevo alcalde "con el fin de solicitarle una reunión para abordar la problemática que la ciudad de Barcelona tiene en lo referente a la seguridad y que afecta directamente al conjunto de la institución de la Policía de la Guardia Urbana".
Entre las cuestiones a tratar precisan "la falta de recursos humanos, recursos materiales, infraestructuras, flota de vehículos y condiciones sociolaborales y económicas del cuerpo".
SUBE LA CRIMINALIDAD EN BARCELONA
La CSIF remarca en su nota que, "desde el año 2015 y hasta el día de hoy, la ciudad ha sufrido un gran deterioro, en sus espacios públicos, de suciedad, inseguridad y conflictividad social. La criminalidad ha subido de forma insostenible, hasta el punto de que durante años los ciudadanos, en el barómetro municipal, la sitúan como su principal preocupación".
Dos agentes de la Guardia Urbana de Barcelona en una imagen de archivo / ARCHIVO
Para el sindicato, "es responsabilidad de los poderes públicos abrir un debate político, social y mediático sobre el modelo policial de la ciudad de Barcelona" y "responsabilidad de todos llegar a un pacto de ciudad sobre la seguridad, donde todos nos impliquemos".
"Nosotros apostamos por una Policía de la Guardia Urbana como policía integral de la ciudad, que asuma las competencias íntegras que le otorga la Carta Municipal, la Ley de FFCCSS y la Ley de Policías Locales", precisa CSIF.