El taxi rendirá homenaje a Carlos, el compañero de 53 años que murió el pasado jueves por la noche tras ser agredido por un motorista en la calle de Travessera de Les Corts de Barcelona.
El portavoz de Élite Taxi, Tito Álvarez, ha anunciado en rueda de prensa la convocatoria de un parón de dos horas durante el próximo miércoles, 8 de noviembre. "Entre las 10:00 y las 12:00 horas ningún taxi funcionará en toda el Área Metropolitana", ha asegurado.
MARCHA POR CARLOS
Si lo harán, no obstante, aquellos destinados a casos de urgencia como cuestiones médicas. "Evidentemente, seguiremos dando el servicio de forma gratuita para aquellos que tengan que ir a hospitales por cuestiones inaplazables, como niños que tienen que recibir radioterapia", ha añadido Álvarez.
Este miércoles se prevé que una ola amarilla y negra llegue a Barcelona, en una marcha que colapsará el centro de la ciudad. "Haremos un acto de homenaje en la Gran Via de les Corts Catalanes con el paseo de Gràcia, llenaremos ambas calles", ha explicado el portavoz de Élite Taxi. En la intersección entre las dos arterias de la ciudad, realizarán un homenaje en memoria del compañero fallecido.
ACUSACIÓN PARTICULAR
En la misma línea, Álvarez también ha avanzado que este martes el sindicato se personará como acusación particular contra el motorista que agredió a Carlos y pedirán que se le juzgue no por un delito de agresión, sino por uno de homicidio, con una pena de entre 10 y 15 años de prisión.
"No podemos consentir que esta persona continúe en la calle", ha aseverado. "Sabemos que no tenía intenciones de matarlo pero golpeó con un guante de protección al compañero, por lo que se debe tenerse en cuenta cierta intencionalidad", ha considerado.
AÑO Y MEDIO EN BARCELONA
"Sabemos también que el juez está esperando los resultados de la autopsia (...) y ya hemos puesto a disposición de los Mossos d'Esquadra un vídeo en el que se ve la agresión" que terminó con la vida del compañero.
De origen boliviano, llevaba un año y medio trabajando en Barcelona tras mudarse desde Madrid, donde también era taxista. Esa fatídica noche, le había cambiado el turno a su sobrina, con quien comparte el taxi.
Álvarez también ha pedido a los taxistas de Barcelona que se protejan. Explica que la capital catalana vive una situación de estrés y crispación entre los conductores que, en su opinión, se debe en buena medida a la pérdida de carriles y calles por las que transitar. Por ello, pide a los trabajadores que, ante una situación de peligro, no salgan de los vehículos.