La jueza ha dejado en libertad con cargos al motorista que mató a Carlos, un taxista de 53 años, el pasado 2 de noviembre en Barcelona. La magistrada ha retirado tanto el pasaporte como el DNI al acusado, que deberá personarse cada jueves en el juzgado.
La acusación pedía, sin embargo, prisión provisional. El gabinete de abogados Vosseler, en representación del sindicato Élite Taxi, argumentó en su día que "existía un elevado riesgo de fuga".
LOS HECHOS
"Acatamos las medidas cautelares impuestas, pero consideramos que el investigado debería haber ingresado en prisión", ha valorado el líder de la organización, Tito Álvarez.
Los hechos tuvieron lugar a la altura del 192 de la Travessera de Les Corts a principios de mes. Carlos, de origen boliviano, llevaba algo menos de dos años trabajando en Barcelona tras haberme mudado desde Madrid.
UN GOLPE FATAL
Aquella trágica noche, le había cambiado el turno a su sobrina, con quien compartía vehículo y profesión. Durante su turno de noche, tuvo una discusión de tráfico con un motorista que, pertrechado con los guantes de protección, le golpeó en la cabeza.
Carlos fue hospitalizado y terminó muriendo unos días después. Si bien el sindicato tiene claro que el homicida "no tenía intención de matarle, si quería causarle daños, pues no se quitó los guantes reforzados". Por ello, anunciaron que pedirán una condena acorde por un delito de homicidio y no de lesiones.