El pequeño comercio pugna día sí, día también, con los nuevos modelos de compra. El mercado online y la presencia de cada vez más turistas son elementos que ponen en jaque al pequeño comerciante de barrio y, si bien algunos logran adaptarse a los nuevos tiempos, otros se quedan por el camino. Eso es lo que ha ocurrido con la icónica tienda Partisano, ubicado en la calle de Sitges, en el Raval de Barcelona.

Según han explicado en un comunicado, la gentrificación del barrio, así como la proliferación de la venta online, son los motivos que han llevado a echar el cierre tras 13 años abiertos.

20% DE DESCUENTOS

"Toda la zona de la calle de Tallers ha ido apagándose en los últimos años, las tiendas de discos, música, camisetas y otras han ido cerrando y cada vez eran menos los vecinos que se acercaban a nuestra tienda", han detallado los propietarios de este negocio, centrado en productos de merchandising de los Països Catalans.

La tienda cerrará el 17 de febrero y, hasta la fecha, ofrecen un 20% de descuento en sus productos para liquidar existencias. Sin embargo, no es el fin del negocio como tal, pues trabajan para ampliar sus instalaciones en Celrà (Girona) y en la ciudad de València.