La tensión con los colectivos 'prokupas' por los desahucios en el barrio de Vallcarca ha llegado este miércoles, 28 de mayo, a las puertas del PSC.
Miembros de la Associació Veïnal Som Barri han irrumpido en la sede de los socialistas en Barcelona para exigir una reunión urgente con el alcalde, Jaume Collboni, y reclamar una solución para evitar el desalojo de dos bloques de viviendas.
En un comunicado difundido a través de redes sociales, el colectivo vecinal 'prokupa' ha asegurado que no abandonarán la sede hasta obtener un compromiso formal para sentarse a negociar con el alcalde. “Queremos irnos de aquí con el compromiso de una reunión con el alcalde”, han declarado.
Miembros del colectivo 'prokupa' Som Barri en el interior de la sede del partido
Desahucios
Según denuncian los activistas, el Ayuntamiento “está a punto de desahuciar a 40 personas, 13 de ellas menores de edad, para dejar más solares vacíos” en una zona que lleva años en conflicto por la presión urbanística y la falta de alternativas habitacionales.
Fuentes del PSC han confirmado que la diputada en el Parlament y primera secretaria del partido en Barcelona, Sara Jaurrieta, se ha desplazado a la sede para dialogar con los manifestantes.
Pintadas en edificios
En las últimas semanas, los colectivos prookupas vinculados a Vallcarca, como Som Barri, Heura Negra y los Sindicats de l’Habitatge de Gràcia i Vallcarca, han intensificado sus acciones tras el desalojo del asentamiento que llevaba 15 años ocupando un solar a pie del metro.
Como muestra de protesta, estos grupos vandalizaron la sede del distrito de Gràcia, que amaneció cubierta de pintadas rojas, generando indignación entre los vecinos.
Sin embargo, las acciones generaron descontento entre los vecinos del barrio. Muchos residentes de Gràcia y Vallcarca, hartos de lo que consideran un foco de conflictos y delincuencia, celebraron el desalojo del asentamiento y condenaron los actos vandálicos.
La fachada de la sede del distrito de Gràcia, vandalizada
Las redes sociales se llenaron de mensajes reclamando al Ayuntamiento que pase la factura de la limpieza a los responsables y pidiendo medidas contra quienes continúan okupando viviendas de forma ilegal.
El consistorio, por su parte, ya ha asegurado en diversas ocasiones que estaba ofreciendo alternativas habitacionales a los afectados, aunque no todos han aceptado los recursos ofrecidos.