Es habitual encontrar en cualquier rincón pintadas de diversa índole reflejando las más diversas ideologías. Pero resulta difícil creer que a los vecinos de este edifico les haga mucha gracia que se 'decore' la puerta del inmueble con simbología polìtica, sea cual sea, que no tienen por qué compartir. Eso sí, la pintada deja las cosas muy claras.