La desescalada en España tras el Covid-19 ha hecho que la mayoría de los habitantes de las comunidades autónomas se planteen cómo será la vuelta a la normalidad. Mientras que el ejecutivo central y los principales gobiernos autonómicos y locales discuten sobre las medidas que se han de tomar cuando se inicie el desconfinamiento, la gran mayoría de los ciudadanos sigue acatando las órdenes.
En la fotografía, tomada esta misma mañana en el barrio del Carmel, se puede ver como algunos vecinos cumplen con la normativa. Estos mantienen la distancia de seguridad para evitar la propagación del virus mientras esperan para entrar en la farmacia. Lo que sorprende de esta imagen es el grafiti que ha escrito alguien en el muro de hormigón contiguo al comercio. "La obediencia es el peor contagio", reza la pintada que desacredita las leyes que ejecutan los gobiernos y que contrasta con la obediencia vecinal que se ve en las calles.