El buen tiempo ya ha llegado, y con él las ganas de ir a la playa, tomar el sol, disfrutar de las terrazas de Barcelona y de degustar un buen helado artesanal. En Barcelona hay multitud de heladerías que prometen los mejores (y más deliciosos) helados, pero solo algunas consiguen complacer los paladares más exquisitos. BMagazine ha hecho un recopilatorio de las mejores de toda la capital catalana para que disfrutes de los sabores más especiales y refrescantes con la llegada del verano.
PARAL·LELO
Bolas de helado de la heladería Paral·lelo
Situada en la calle Sèneca, del barrio de Gràcia, se encuentra la heladería Paral·lelo. Este bonito establecimiento, que cuenta con un toque chic muy elegante y un carrito de helado como los de antaño, tiene algunos de los sabores más auténticos de Barcelona. Desde el helado de queso parmesano con vinagre balsámico, al de yogur con curry, el de calabaza con jamón o el de vermut. Su carta también pasa por el clásico gelato italiano de chocolate, stracciatella, vainilla o pistaccio, además de vender helados de palo, polos o deliciosas cookies. Sin duda, esta pequeña heladería formada por un grupo de cuatro amigos de San Remo es todo un must de la ciudad condal.
CREMERÍA TOSCANA
Helados de la Cremería Toscana / INSTAGRAM
La Cremería Toscana de Barcelona, una situada en la calle Muntaner, es una de las heladerías que un buen amante de los helados jamás debería perderse. La fórmula de este local tiene sus orígenes en la mismísima toscana. De allí, Andrea Giuntoli exportó la receta óptima basada en tradición, artesanía y calidad que se aúnan en unos helados que te harán revivir los sabores clásicos como la vainilla o la stracciatela. Además, también ofrecen sorbetes especialmente veraniegos.
DELACREM
Dependiente con un helado de DelaCrem / DELACREM
Muy cerca de la heladería anterior se encuentra DelaCrem, el establecimiento con los helados "más cremosos de Barcelona". Situada en la calle Enric Granados (también tienen otra tienda en el paseo Sant Joan) DelaCrem solo utiliza ingredientes puros, sin necesidad de edulcorantes, que Massimo Pignata, su gerente, combina en deliciosas creaciones para todos los gustos. Destaca también su apuesta por los helados sin gluten y los sorbetes de fruta fresca.
L'EIVISSENCA
Un helado de la heladería L'Eivissenca del barrio de Horta
Si midiéramos el éxito de una heladería por las colas que acumula, L'Eivissenca batiría récords. A partir de las siete de la tarde, la plaza Eivissa del barrio de Horta se llena de barceloneses que aguardan impacientes por hacerse con un de los mejores helados de la ciudad. Aunque su oferta va más allá: la horchata, los turrones (cuando tocan) o los granizados son otras de sus especialidades.
GELAAATI DI MARCO
Algunas de las deliciad de Gelaaati di Marco / GOOGLE MAPS
Justo detrás de la plaza Sant Jaume se encuentra Gelaaati di Marco. Esta heladería situada en el centro de Barcelona alardea de ofrecer el "auténtico helado artesanal italiano con los mejores ingredientes". En su carta lucen una amplísima oferta de sabores –entre los que destaca el de chocolate– que combinan con sorbetes de fruta natural, yogur espresso, cannoli, helados bajos en azúcar, sin gluten, helados sin lactosa, veganos, con leche biológica y granizados.
MAXIMUM
Un helado de la heladería Maximum de Barcelona / MAXIMUM
Maximum es una de las heladerías más antiguas de Barcelona. Su historia se remonta a 1940, cuando un veneciano decidió abrir la persiana en el céntrico espacio de Barcelona. Desde entonces, esta saga de heladeros se las ha ingeniado para deleitar los paladares de todo el que se decida a poner un pie en el local. Difícil no querer repetir con la tarrina de cacao Kingston o la de leche merengada.
SIRVENT 1926
Mostrador de la heladería y horchatería Sirvent 1926
La horchatería y heladería Sirvent es una de las más auténticas de Barcelona. Fundado en 1926, este establecimiento –también especializado en turrones– se convirtió en uno de los puntos de encuentro de los más foodies de la época. Hoy en día sigue manteniendo su esencia y sus productos más exquisitos realizados con la misma receta que en aquel entonces. Situada en la ronda Sant Pau, cuenta con helados de todos los sabores hechos de forma artesanal.
GOCCE DI LATTE
Una tarrina de dos sabores de Gocce di Latte
Este céntrico local también presume de ADN italiano, al igual que DelaCrem, la Cremería Toscana, Paral·lelo o Gelatti di Marco. Aunque la localización (Pla de Palau) podría situarla como un establecimiento turístico, la calidad de su producto la convierte en una de las mejores heladerías artesanales de la ciudad. Entre sus especialidades, los de coco con menta y pistaccio obligan a repetir visita. Gocce di Latte también ofrece otros dulces como gofres, cinnamon rolls, pancakes o cookies.
ROCAMBOLESC
Dos de los originales helados de Rocambolesc
Jordi Roca inauguró su particular versión de la fábrica de chocolate de Willy Wonka en La Rambla de Barcelona. Rocambolesc es el lugar donde sus postres toman forma de helado y despiertan el interés de los transeúntes que pasean por la turística zona. Estos brutales helados vienen acompañados de toppings de todo tipo y de todos los sabores, también ofrecen versiones heladas. Es sin duda una de las heladerías más originales de la ciudad.
EYESCREAM AND FRIENDS
Helado con ojos de Eyescream and Friends
Algunos aseguran que los de Eyescream and Friends son "los helados más creativos de Barcelona". Este pequeño local situado en el paseo Joan de Borbó, al lado de la playa de la Barceloneta, ofrece una original propuesta de bandeja que incluye un helado con ojos y dos toppings a elegir. Entre los ocho sabores de la carta predomina el de yogur.