Barcelona es una de las ciudades con más diversidad a cuanto a cultura gastronómica se refiere. Su oferta culinaria no solo refleja la riqueza de la cocina catalana, sino que también incorpora influencias de todo el mundo, entre ellas la comida de Medio Oriente. En la capital catalana podemos encontrar restaurantes que ofrecen platos sabrosos y tradicionales, que brindan una experiencia cultural única a través de sus aromas, especias y técnicas culinarias.
Uno de los platos más emblemáticos de la cocina de Medio Oriente es el falafel. Su popularidad se ha extendido a nivel mundial gracias a su sabor delicioso y versatilidad. Este sabroso bocado es una delicia que ha ganado corazones y estómagos por su combinación de textura crujiente y un centro tierno y lleno de sabor.
Qué es el falafel
El falafel es una masa frita en forma de bola elaborada a base de garbanzos picados, cebolla, ajo y, normalmente, perejil. Aunque se desconoce su origen, todo apunta a que nació en Egipto, uno de los países más virtuosos en el manejo de las legumbres.
Metrópoli te trae una lista de los mejores restaurantes de Barcelona para comer falafel, según el portal gastronómico Hule y Mantel:
Hummus Barcelona
El primer restaurante de la lista es Hummus Barcelona, en la calle València 227. Este establecimiento ofrece el falafel clásico de pan de pita con una gran variedad de hummus y tahini. Comerse un falafel en este local es muy económico, con un precio a partir de los siete euros. El precio del hummus no baja de los 5,40 euros.
Zaatar&Co
En este restaurante de la calle Balmes 79 ofrecen una gran variedad de entrantes de cocina tradicional, como el labné, hummus o el halloumi. Uno de los platos estrella es el wrap de falafel con encurtidos y tahini, aunque no puedes irte sin probar el zaatar con queso en pan plano, según Hule y Mantel. Los precios también son razonables: ocho euros el wrap y cinco el hummus.
A Tu Bola
Ubicado en el barrio del Raval, en la calle Hospital 78, el restaurante A Tu Bola ofrece un falafel hecho con garbanzos con hummus y falafel con lenteja tandoori y calabacín. Su nombre hace referencia a unas bolas que teletransportan al continente asiático con sabores como curry, piña o mango. Los precios son un poco más elevados que las otras propuestas, entre 10 y 12 euros.