Lío por una intervención de la Guardia Urbana en un bar de Barcelona: durante la tarde del domingo, mientras los clientes disfrutaban de un espectáculo cómico, el dueño de La Muriel de Gràcia desalojó el interior del local después de que una patrulla se personase en el lugar. El motivo, habían recibido una queja porque no se respetaban las restricciones de aforo por el Covid-19.
En la cuenta de Instagram de ‘We Bitches’, el grupo de humoristas que organizaba el evento asegura que fue la Guardia Urbana quien les hizo desalojar el local. “El aforo que teníamos era el estipulado, pero contaron al elenco de cómicos como gente que estaba de público”, afirman los artistas en un comunicado. Una versión que matizan, a Metrópoli Abierta, fuentes del Ayuntamiento de Barcelona: “Los agentes acudieron por una denuncia sobre la restricción del aforo. Pero no se cerró el local ni se desalojó. Fue el propietario quien dijo que desalojaría a la gente que hiciera falta para continuar con el espectáculo”. Las mismas fuentes confirman que sí que se contó a todas las personas que había en el interior, que en ese momento no se respetaban las medidas y que se explicó al dueño que si recibía un segundo aviso sería sancionado.
DONACIÓN PARA EL BAR
Los comediantes han hecho saber que retornarán el importe de la entrada a las personas del público que no pudiesen disfrutar del show y que soliciten un reembolso. El resto del dinero lo destinarán a ayudar al bar La Muriel, “que está sufriendo mucho con la crisis del Covid-19”.