Las playas de Badalona, igual que las del resto del litoral catalán, permanecen estos días desiertas y limpias. Sus aguas están cristalinas, y la arena apenas tiene pisadas. La naturaleza poco a poco gana terreno, reconstruyéndose ante la ausencia del hombre, su mayor enemigo.

Una vez se levante el confinamiento, ¿seremos capaces de mantener las playas limpias como a todos nos gustaría? ¿Es posible no sólo ver el litoral puro y en su estado natural, sino también disfrutarlo?

Hagamos un esfuerzo, y preservemos este pequeño tesoro en vez de destrozarlo una vez acabe el confinamiento...    

Vista de las playas desiertas en Badalona / EFE - ENRIC FONTCUBIERTA



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