Colau recuperará el Canal de la Infanta como una vía verde

El trazado del histórico Canal de la Infanta es un paseo por una vía verde y azul que va de Molins de Rei a Barcelona, hasta los pies del faro de Montjuïc. Se trata de un proyecto de memoria histórica y de protección del patrimonio industrial. No solo eso también puede ser un proyecto que cohesione el territorio y que aporte identidad metropolitana a un nivel más humano.

También puede funcionar como una herramienta para sacar del olvido 17 kilómetros de trazado hídrico. No será nada sencillo pero el primer paso, el de comprobar el estado de la vieja infraestructura y la viabilidad de su restauración, ya se ha dado, según informa este jueves El Periódico de Catalunya. Concretamente, es un estudio realizado por el Ayuntamiento de Barcelona en colaboración con la Escola Tècnica Superior d’Arquitectura de la UPC.

SE HARÁ POR TRAMOS

Según confirma uno de los tres arquitectos que firma dicho estudio, Xavier Llobet, al citado medio la idea es que el Canal de la Infanta se puede recuperar "por tramos", aunque no todos con agua. Incluso en algunas en las que el agua está soterrada se optará por hacer vías verdes.   

En cualquier caso, de momento el proyecto está en una fase muy inicial. Solo ha comportado una aportación inicial del consistorio barcelonés a un trazado que cruza seis localidades y abarca dos comarcas. La reunión de las partes con el Área Metropolitana estaba prevista para marzo, pero se pospuso por culpa de la pandemia del coronavirus.

EL EJEMPLO DE CAN BATLLÓ

Eso sí, desde el Ayuntamiento no solo se ha examinado la viabilidad de la futurible iniciativa sino que se trabaja ya con la idea de que se haga realidad. Desde la plaza de Sant Jaume, ven en la recuperación de Can Batlló un ejemplo a seguir.

En el caso del Canal de la Infanta, el estudio evidenció que pasaba por debajo de una nave del complejo, se excavó y salieron los restos. Después del hallazgo, la reordenación del espacio que ocupó la antigua fábrica textil se hará con la mente presente en recordar que por ahí pasó dicho cauce.

Algo que lo mismo vale para Can Batlló que para el resto de intervenciones urbanas que pisan la estructura hídrica que transformó en cultivables las tierras del delta del Llobregat y que convirtió el margen izquierdo del río en una de las grandes huertas de Europa durante la Primera Guerra Mundial (1914-1918).

CUBIERTO DESDE 1940

El Canal arrancaba en Molins de Rei y después de cruzar Sant Feliu, Sant Joan Despí, Cornellà y L’Hospitalet entraba en Sants. A la altura de Can Batlló giraba para bordear Montjuïc y desembocar en El Morrot, a los pies del faro.

Ahora apenas queda nada visible de la infraestructura en la ciudad, solo un pequeño tramo seco al lado del muro del cementerio, pero sí permanece en la memoria de los más veteranos de los barrios de La Marina del Port y La Marina del Prat Vermell. En 1940, el Canal se cubrió en esta parte dando lugar a la calle de la Mare de Déu del Port. En aquel momento, el espacio agrícola ya había desaparecido y el urbanismo había llegado para quedarse.