El primer centro de medicina tradicional china de Europa que se tenía que instalar en L'Hospitalet de Llobregat no se hará. Fuentes del Ayuntamiento de la ciudad metropolitana confirman que el equipamiento no se ha levantado y ha quedado descartado. "Se fueron", dice un portavoz municipal en referencia a los inversores asiáticos. "De un día para otro desaparecieron".
A principios de 2020, la alcaldesa de L'Hospitalet de Llobregat, Núria Marín, dio un ultimátum al Gobierno de Pequín, a través de la embajada de la República China, para que se iniciaran las obras en la antigua fábrica textil Godó i Trias. Por aquel entonces, Marín ya dijo que si no había respuesta el Ayuntamiento estudiaría otros proyectos interesados en el viejo recinto fabril.
UNA INVERSIÓN DE 80 MILLONES DE EUROS
En mayo de 2017, el consistorio firmó un convenio con Pequín para instalar el centro de medicina china en L'Hospitalet. El Ayuntamiento de L'Hospitalet iba de la mano de la Generalitat en el proyecto. Las obras debían haber empezado en 2018 para que el equipamiento empezara a funcionar en 2020. La inversión prevista era de unos 80 millones de euros, pero jamás se ha ejecutado.
Un portavoz municipal explica que se dejó a los inversores una oficina en un edificio del consorcio que el Ayuntamiento de L'Hospitalet y la Generalitat tienen en la Gran Via. "Un día, antes de la pandemia, desaparecieron de un día por otro y sin dar ninguna explicación. Llegamos de unas vacaciones, les fuimos a saludar y nos encontramos el despacho vacío".
NO ENTENDÍAN QUE HABÍA QUE SEGUIR UNOS PROCEDIMIENTOS
Representantes del gobierno de L'Hospitalet y la Generalitat llegaron a viajar a Pequin. A los inversores y al gobierno chino les gustaba la arquitectura de la fábrica Godó i Trias. "Les recordaba a la suya". ¿Entonces, cuál pudo ser el problema? Una fuente municipal consultada explica, a modo de hipótesis, que los inversores chinos no llegaron a entender que aquí los proyectos tenían que seguir unos procedimientos reglados y obtener unos permisos. "Lo veían todo muy complicado", recuerda, en un intento de explicar qué pudo pasar y por qué el proyecto jamás se ha ejecutado.
Antes de llegar a L'Hospitalet, el proyecto del centro de medicina tradicional china pasó por Barcelona y se ofreció al Ayuntamiento. En mayo de 2017, el entonces alcalde accidental, Gerardo Pisarello se refirió en Facebook a la propuesta como un proyecto privado que estaba en stand by desde el mandato anterior -el de Xavier Trias- "que requería, entre otras cosas, un solar gratuito en Barcelona y era dudoso que comportara puestos de trabajo para los barceloneses... como si sobraran solares y no necesitaran lugares de trabajo".
PISARELLO DIJO QUE NO TOMÓ NINGUNA DECISIÓN SOBRE EL CENTRO CHINO
Pisarello, ahora en el Congreso de los Diputados, respondió así a una información de Crónica Global que decía que la pretendida inversión de la farmacéutica Tongrentang en Barcelona se había echado a perder, entre otros motivos, porque había hecho esperar a la delegación china 45 minutos y les había dejado con una subordinada.
En la misma publicación de Facebook, el exconcejal barcelonés aseguró que él no había recibido a ningún inversor en pantalón corto, como aseguraba el medio, ni había tomado ninguna decisión sobre un centro de medicina chino. Desde su servicio de prensa municipal se dijo entonces que Pisarello jamás se reunió con ellos, sí hubo un encuentro en el Ayuntamiento con un cargo de la Generalitat, que hizo de puente, y que los inversores chinos querían la cesión de un solar gratuito.
DEL VALL D'HEBRON AL FÒRUM
Según la información que publicó entonces Crónica Global, el interés de los inversores chinos eran unos terrenos en el Vall d'Hebron, aunque desde el Ayuntamieto de L'Hospitalet se apunta que otro de los espacios que la delegación china visitó en Barcelona fue el recinto del Fòrum, del que no les gustó la existencia de la depuradora.
Tras la desaparición de los inversores chinos, el Ayuntamiento de L'Hospitalet busca nuevos inversores que puedan estar interesados en la fábrica Godó i Trias. Explican que sobre la mesa hubo un proyecto de alimentación que no se concretó y recuerdan, que si bien el edificio se encuentra en buen estado, la instalación de alguna iniciativa empresarial requerirá de una inversión en rehabilitación.
La fábrica Godó i Trias se encuentra en L'Hospitalet, cerca del Ikea. Es un edificio modernista considerado un Bien Cultural de Interés Local. La primera edificación, de 1903, es del arquitecto Ferran Junoy. La Godó i Trias se dedicó al ámbito textil. La última ampliación data de 1964 y es obra de Frederic Correa i Alfons Milà.