Los padres de un joven, un pastor evángelico y su mujer, irán a juicio por maltratar y agredir al chico por ser homosexual.
Los hechos sucedieron en Terrassa desde el año 2017. El padre y la madre se enfrentan a penas de dos y un año de cárcel por presuntos delitos de maltrato doméstico, lesiones y delitos de odio. Los tres convivían en el mismo piso.
Imagen de archivo de la bandera LGTBI - A. Pérez Meca - EUROPA PRESS
SEGUIDORES "ESTRICTOS"
La Fiscalía ve pruebas de delito y califica al matrimonio como dos seguidores "estrictos" del culto evangélico. Consideran probados los delitos contra la integridad moral y física del hijo.
Por su parte, los padres han denunciado a su hijo, aunque Fiscalía no da "fiabilidad" a su relato.
"DIOS TE CURARÁ"
En el 2017, el hijo huyó de casa por miedo a que sus progenitores descubriesen su orientación sexual. El pastor y la mujer acudieron entonces al instituto del chico para exigirle que recapacitara. Según un escrito de la acusación, el padre declaró en una reunión con personal docente que "el lugar natural de el pene está en la vagina y no en el sitio por donde se defeca".
También le aseguraron que si volvía a casa, Dios lo curaría.
Manifestación del colectivo LGTBI en una imagen de archivo
"DAIS ASCO"
La acusación también afirma que, en una ocasión, cuando el padre vio a su hijo con su pareja, se acercó al autobús donde estaban y, a través del cristal de la ventana, les dijo que "daban asco".
Semanas después, el hijo concertó una cita con los padres para conseguir que le dieran su documentación personal. Fue en este encuentro donde se produjeron los insultos más fuertes y finalmente las agresiones físicas.
La Fiscalía da veracidad a las declaraciones y a la historia del hijo y por eso pide la absolución de la pareja de adolescentes y limita la acusación a los padres.