La necesidad es exasperante. La demanda de vivienda de una población en aumento, que no puede alcanzar los precios que se reclaman, ha llevado a los municipios del área metropolitana de Barcelona a pasar a la acción, con planes a contra reloj para construir pisos de protección oficial, y también en el mercado libre. En ejecución hay 19.151 viviendas. Faltan más. Muchas más.
La lucha es todavía tímida, pero ha comenzado, en la propia ciudad de Barcelona, donde se quieren corregir los errores de los dos últimos mandatos, y en ayuntamientos como Gavà, Cornellà de Llobregat y Viladecans. El propio organismo supramunicipal, el AMB, ha logrado poner en pie una empresa mixta, Habitatge Metròpolis Barcelona, para intentar cambiar la situación. Sin embargo, una cosa es lo que se proyecta, lo que se podría construir, y otra lo que realmente está en marcha en toda esa primera y segunda corona de Barcelona.
El área metropolitana se pone las pilas
El análisis de los planes de cada municipio constata que se ha producido una reacción, que las administraciones ‘han entendido el mensaje’. Un exhaustivo informe de la entidad privada Barcelona Global, señala que en el horizonte de 2050 la falta de vivienda es de una dimensión colosal, porque la demanda será de unos 450.000 nuevos pisos. En los próximos cinco años se podrían generar hasta 25.000, según sostiene el informe, pero siempre que las administraciones resuelvan un problema hasta ahora insoluble: la rigidez existente a la hora de realizar los trámites necesarios antes de comenzar a levantar un edificio.
Barcelona encabeza la lucha metropolitana para la creación de vivienda social, que se cifra en 19.151 viviendas en ejecución. A los 5.000 pisos en diferentes fases de ejecución en la capital catalana le siguen, en volumen de viviendas en construcción, tres municipios del Baix Llobregat. Gavà, Cornellà y Viladecans, con 4.896, 3.187 y 2.996 pisos respectivamente, son las localidades que cuentan con una mayor apuesta en este ámbito.
Esplugues también se encuentra entre los municipios con mayor apuesta por la construcción de vivienda social, con tres promociones en ejecución. El Área Residencial Estratégica (ARE) Montesa es la principal iniciativa en marcha. El barrio espluguense contará con 2.105 viviendas de nueva construcción, de las que 1.059 serán protegidas con un reparto de 530 domicilios en régimen general y 529 en régimen especial. De estos pisos, unos 700 serán de alquiler.
Ca n'Oliveres-Finestrelles es la segunda promoción en marcha por volumen de viviendas. El municipio metropolitano tendrá 132 nuevos domicilios tras su finalización, divididos en 60 de compraventa y 72 de alquiler, todos en régimen general. La promotora es Metropolitan House, y se construyen en régimen de cooperativa. El barrio de Can Clota suma medio centenar de pisos protegidos en construcción. Todas las viviendas son de compraventa, y se reparten en 33 de régimen general y 17 en régimen compartido.
En Molins de Rei el Instituto Metropolitano de Promoción de Suelo y Gestión Patrimonial (IMPSOL), gestionado por el AMB, ha finalizado la edificación de 61 viviendas de protección oficial en régimen de alquiler en el barrio de Les Guardioles. Esta urbanización ha favorecido la conexión de los barrios del Àngel y de la Riera Bonet. Se trata de 79 viviendas más para 2024.
A finales de 2023, se formalizó la transmisión de las parcelas R10 y R13, donde se llevará a cabo la construcción de 44 y 35 viviendas, respectivamente. Se prevé que el inicio de las obras sea en el segundo trimestre de 2024. Cuando finalice el proyecto, el municipio sumará 680 viviendas, la mitad de protección oficial (196 promovidas por el IMPSOL).
Castelldefels, con 305 viviendas previstas este año y un proyecto pendiente de licitación. Del total, 171 son de propiedad municipal: 135 en régimen de concesión en la calle General Palafox, 27, entre la calle de la Esglèsia y la avenida Diagonal; y 9 adquiridos por derecho de tanteo. En el edificio de Diagonal se habilitará un piso destinado a usuarios en riesgo de exclusión social residencial, cuya licitación está prevista para el segundo trimestre de 2024.
En el ámbito de la propiedad privada hay 64 viviendas sociales de alquiler disponible: cinco del programa Reallotgem, 25 de alquiler social obligatorio, 21 de la bolsa de vivienda y 11 del convenio Fundació Hábitat3. Durante este año, se adjudicará por sorteo público una promoción de 70 apartamentos de protección oficial en régimen de alquiler.
El Prat cuenta con el desarrollo de un nuevo barrio –el Eixample Sud– en el que la mitad de los 3.000 pisos construidos y por construir serán de protección oficial en los próximos años. En 2024 se incorporarán 300 viviendas a este parque: 101 en un bloque de pisos promovido por la COV, actualmente en construcción, otro bloque de 135 viviendas impulsado por Habitat 3 y la Fundació Benestar i Família y uno de 72 pisos promovido directamente por Prat Espais. Fuera del ámbito de Eixample Sud, Prat Espais está promoviendo otro bloque de ocho pisos públicos de alquiler asequible en la calle Vicenç Ferrer.
Además, está a punto de aprobarse provisionalmente el nuevo plan urbanístico del barrio de Seda-Paperera, que se ha revisado, entre otras cosas, para aumentar los porcentajes de viviendas de protección y público. En el nuevo plan urbanístico se prevé que aproximadamente el 45% de 5.759 viviendas que se construirán en este nuevo barrio sean de protección oficial, es decir, 2.754 pisos. También se contempla que aproximadamente uno de cada cinco pisos sea de alquiler asequible.
Sant Boi de Llobregat está en pleno desarrollo de 252 pisos, todos de alquiler. Con fechas de conclusión fijadas, se espera que en 2024 se completen 10 viviendas, seguidas de 152 en 2025 y las restantes 90 en 2026. Paralelamente, una cooperativa local está a cargo de la construcción de otras 67 viviendas bajo los regímenes VPO y concertados, con un plazo de finalización programado para este año.
Sant Joan Despí suma cuatro promociones de vivienda pública. Dos de ellas se ubican en la calle de la Fontsanta, conformadas por 35 y 48 pisos de venta. En el cruce de esta vía con la avenida de Barcelona, el Ayuntamiento está reconstruyendo un edificio con 105 domicilios que quedó paralizado durante la crisis de 2008. El bloque, comprado por el consistorio a un privado, se destinará íntegramente a VPO de venta.
En el ámbito delimitado por las calles Major, Josefa Romeu y Gabriela Frígola, ocupado anteriormente por una estación de ITV, se están edificando otras 53 viviendas, de venta en su totalidad.
Dinamismo en el Barcelonès Nord
Sant Adrià de Besòs ha sumado, en los últimos meses, 58 viviendas sociales distribuidas en tres promociones en los barrios de La Catalana y Besòs, dos de ellas del Ayuntamiento y otra del IMPSOL (AMB). De cara a los próximos años, el Pla Director Urbanístic (PDU) prevé la construcción y adjudicación de más de 700 nuevas viviendas. Esta, junto con otras promociones ya planificadas, sumarán al municipio unos 897 hogares sociales en diferentes regímenes ejecutados tanto por el consistorio como por la Generalitat a través del INCASOL.
Santa Coloma de Gramenet está a punto de finalizar la construcción y adjudicación de unas 70 viviendas distribuidas en los barrios de Les Oliveres y Fondo, 16 de ellas para jóvenes. Estas nuevas residencias se suman a los proyectos tanto propios como en colaboración con el IMPSOL. En total, el municipio colomense prevé que en este mandato se construirán y adjudicarán un total de 531 pisos sociales, que pueden ser de alquiler o compraventa.
Las dos promociones de vivienda social que se están edificando en Sant Just Desvern serán, íntegramente, de alquiler. El barrio de Can Modolell dispondrá de 42 nuevas viviendas de régimen especial impulsadas por el IMPSOL en un solar municipal, destinadas a la tercera edad. La empresa pública Promunsa impulsa una segunda promoción en el barrio Centre. En este caso, se sumarán ocho pisos que se adjudicarán a jóvenes.
Sant Feliu de Llobregat no cuenta con promociones de vivienda social en ejecución en estos momentos. Jaume Manyoses, regidor de Derecho de la Vivienda, explica a este medio que el Plan de Acción del mandato prevé la promoción de vivienda pública de alquiler, y detalla que el gobierno municipal está elaborando el Plan Local de Vivienda. El edil sanfeliuense achaca la falta de promociones en ejecución a la “exigua herencia” recibida por parte del anterior Ejecutivo local.
¿Qué pasa en Badalona?
Al igual que Sant Feliu, en L'Hospitalet de Llobregat no hay ninguna promoción de HPO actualmente en construcción. La última corresponde a los años 2021-22, ubicada en la calle Batllori y compuesta por 85 viviendas de HPO. Sin embargo, en julio de 2023, el Ayuntamiento de L'Hospitalet y la Generalitat, a través del INCASOL, firmaron un convenio para la construcción de 179 nuevas viviendas protegidas de alquiler asequible en el municipio. Estas promociones se sumarán al parque de 708 viviendas de alquiler social que ya posee el INCASOL en este municipio.
Las primeras tres promociones (primera fase) se construirán en solares cedidos por el Ayuntamiento, ubicados en el carrer de la Muntanya, 17-19 (21 viviendas), en la avenida de Pau Casals, 32 (122 viviendas), y en la avenida de Pau Casals, 48 (36 viviendas). Habrá una segunda fase, con el objetivo de llegar a 350 viviendas, que se llevará a cabo en diferentes solares de la avenida del Carrilet y las calles del Canigó, de Rodés y del Cobalt.
Badalona es un páramo en cuestión de vivienda social. El municipio no cuenta con ningún proyecto que haya sido recientemente adjudicado ni en ejecución. El consistorio betulense ha explicado a este medio, sin embargo, que sí hay una firme intención por parte del ejecutivo que lidera Xavier García Albiol de llevar a cabo proyectos en esta cuestión a lo largo del mandato, si bien se encuentran en fase tan embrionaria que todavía no hay detalles.