Indignación en Cornellà por la agresión de un Guardia Urbano a una persona con discapacidad. El hombre, de 30 años, fue víctima del acoso por parte de un agente fuera de servicio que, por un malentendido, pensó que este estaba grabando a sus hijos con el móvil. Fue entonces cuando empezó a gritarle “Hijo de puta, te voy a matar, te voy a arrestar. Eres un pedófilo”, mientras lo intentaba agredir, tal como ha denunciado la madre de la víctima a Metrópoli.

Malentendido en el tranvía

Según ha relatado la misma a este medio, todo ocurrió el pasado 11 de julio sobre las 19:00 horas, en la parada del tranvía de Les Aigües de Cornellà. La tensión se desató cuando la víctima esperaba sentada en la estación con el móvil. En aquel momento, un urbano fuera de servicio pasó con su coche, en el que viajaba con su familia. Fue entonces cuando el policía empezó a gritarle “¡Le has hecho fotos a mis hijos! ¡Te voy a matar, pederasta!”, explica Montse (nombre ficticio). 

Según detalla la misma, el policía cogió el móvil de su hijo, Juan (nombre también ficticio), para borrar las imágenes, comprobando que no había ninguna. Aun así, el agente lo persiguió por el tranvía, identificándose como Guardia Urbano y obligando al conductor a detener el convoy. Una trabajadora social que en aquellos momentos se encontraba en el tranvía salió en defensa de Juan.

Tranvía circulando por Barcelona AJ BCN

“Se puso tan agresivo que la gente que había allí tuvo que rodear a mi hijo para protegerlo. No paraban de decirle que parase. ‘¿No ves que no está bien?’, dijo un señor”, relata. Entonces, el agresor también intentó atacar al hombre, tal como denuncia Montse a este medio, que en esos momentos no estaba físicamente con Juan, pero sí que lo escuchó todo por teléfono. “La trabajadora social me explicó que mi hijo tuvo un ataque de ansiedad. No podía parar de llorar, entró en pánico, incluso convulsionó”, lamenta.

Delito de odio

A la mañana siguiente, Montse acudió a la comisaría de los Mossos d’Esquadra de Cornellà para denunciar los hechos. La Fundación Irídia también está al corriente de todo lo sucedido. “Voy a llegar hasta el final. Esto no va a quedar así”, asegura la madre de Juan a este medio.

Fuentes internas de los Mossos han confirmado a este medio la denuncia, que ha sido tramitada al juzgado de Cornellà. Ahora, está en manos del juez instructor el abrir diligencias contra el Guardia Urbano por un presunto delito de discriminación y odio. “Al identificarse como un agente de la autoridad, cambia el estatus, así como la gravedad de los hechos”, destacan fuentes policiales. Por ello, el acusado se puede enfrentar a una vía interna disciplinaria con un plus de sanción.

Además, Monte interpuso una queja escrita en el Ayuntamiento. Emilia Briones, teniente de alcalde de Presidencia y Seguridad de Cornellà, habló con ambas partes y, tal como aseguran fuentes municipales, se puso al servicio de la denunciante “para lo que esta necesitara”. “Se ha abierto un expediente interno porque el urbano no estaba de servicio. Cuando tengamos una resolución judicial se tomarán las medidas pertinentes según lo que dicte la sentencia”, señalan las mismas.

Secuelas de la agresión

Desde el día de la agresión, Juan “no puede dormir por las noches ni hablar del tema, porque si no se bloquea. Además, la situación le ha provocado problemas digestivos”, relata su madre, quien también nos explica que su hijo tiene miedo de salir a la calle. “Estamos tratando el tema con psicólogos”, cuenta.