Polémica en la Fiesta Mayor de El Prat de Llobregat, que este año no tendrá feria de atracciones tras el fracaso en las negociaciones. Una noticia que ha caído como una jarra de agua fría entre los vecinos de la localidad y que el mismo consistorio ha lamentado en un comunicado.

El nulo entendimiento entre el Ayuntamiento y la Coordinadora de Feriantes de L’Hospitalet, Esplugues y el Baix Llobregat pone fin a 40 años de colaboración, siendo este el primero (sin contar el de la pandemia) en que la Fiesta Mayor no contará con la tradicional feria de atracciones.

Cambio de ubicación

El principal punto de desacuerdo ha sido el cambio de ubicación de la ronda de Ponent a la ronda Sud, cerca del Parc Nou, como consecuencia de las obras que el Ministerio de Fomento está llevando a cabo. El recinto propuesto por el Ayuntamiento del Prat no convenció a los feriantes, que rechazaron la propuesta provisional.

En declaraciones a El Periódico, el presidente de la Coordinadora de Feriantes, Emilio Carreras, expresó que la ronda Sud “carece de flujo comercial”, lo que les ha llevado a declinar su participación. “No hemos llegado a un acuerdo”, señaló al anterior medio citado. En palabras de Carreras, la feria del Prat “era una de las mejores de la comarca”, con más de 100 atracciones.

Imagen de archivo de una feria de atracciones en Barcelona Pixabay

El Ayuntamiento, liderado por Lluís Mijoler, ha lamentado públicamente la “decisión unilateral” de la Coordinadora, señalando que perjudicará a la economía de los feriantes y al disfrute de los vecinos del municipio, “a los que se priva de las atracciones”. El gobierno municipal ha destacado que la Coordinadora conocía la situación desde febrero, cuando se les comunicó el cambio de emplazamiento.

Zona protegida

El lugar propuesto por el Ayuntamiento para instalar las atracciones de la Fiesta Mayor no solo no convencía a los feriantes. La asociación Poteta Blava denunció a finales de agosto al gobierno municipal por sugerir una zona que se encuentra a pocos metros de una Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA). Los denunciantes apuntaron a que su localización “podría causar daños irreparables a la flora y fauna del lugar”.

La feria se sitúa cerca del Parc Nou, que gestiona el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) y forma parte de una de las zonas húmedas más importantes de Catalunya, el delta del Llobregat. Además, allí se encuentra una colonia de al menos 90 gatos comunitarios, gestionada por voluntarios de la ciudad en coordinación con el gobierno. Por todo ello, el 20 de agosto la asociación presentó una denuncia ante la Fiscalía de Medioambiente de Barcelona.