Buenas noticias para los vecinos de El Prat. Los feriantes y el Ayuntamiento del Prat han llegado a un acuerdo para salvar la feria en la Fiesta Mayor. Hace unos días anunciaron que no iban a montar las atracciones debido a varias controversias con el consistorio. La principal de ellas fue el cambio de ubicación de la ronda de Ponent a la ronda Sud, cerca del Parc Nou, como consecuencia de las obras que el Ministerio de Fomento está llevando a cabo.
El presidente de la Coordinadora de Feriantes, Emilio Carreras, expresó que la ronda Sud “carece de flujo comercial”, lo que les llevó a declinar su participación en un inicio. Sin embargo, la movilización de los vecinos del barrio de Sant Cosme ha logrado convencer a los feriantes para montar las atracciones. Los residentes lanzaron una campaña de recogida de firmas bajo el lema “Yo iré a la feria”. Esta iniciativa, que ha logrado reunir más de un centenar de firmas en redes sociales.
Zona protegida
La feria se llevará a cabo en la ubicación propuesta por el Ayuntamiento: la ronda Sud, cerca del Parc Nou. Una decisión que critica la asociación Poteta Blava, quien a finales de agosto denunció al gobierno municipal por sugerir una zona que se encuentra a pocos metros de una Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA). Los denunciantes apuntaron a que su localización “podría causar daños irreparables a la flora y fauna del lugar”.
La feria se sitúa cerca del Parc Nou, que gestiona el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) y forma parte de una de las zonas húmedas más importantes de Catalunya, el delta del Llobregat. Además, allí se encuentra una colonia de al menos 90 gatos comunitarios, gestionada por voluntarios de la ciudad en coordinación con el gobierno. Por todo ello, el 20 de agosto la asociación presentó una denuncia ante la Fiscalía de Medioambiente de Barcelona.