L’Hospitalet de Llobregat va a darle la vuelta a la imagen del municipio. Este jueves el Ayuntamiento ha emprendido la campaña de plantación de arbolado “más grande de la historia”. De octubre a abril de 2025, se plantarán 3.414 árboles en todos los barrios de la ciudad, para el que trabajarán 14 operarios divididos en tres equipos.

“Iniciamos una misión histórica que nos convierte en una ciudad más amable, saludable y adaptada al cambio climático”, ha celebrado el nuevo alcalde de L’Hospitalet, David Quirós. En la localidad actualmente hay 36.444 árboles, 14.646 en calles, 20.049 en espacios verdes de gestión municipal y metropolitana y 1.749 en equipamientos, como escuelas o centros deportivos, entre otros.

Operarios trasplantan un árbol en la calle Muntanya, en presencia de David Quirós, alcalde de L’Hospitalet AJ L’HOSPITALET

De los 3.414 árboles que se plantarán, 1.203 se ubicarán en las calles de la ciudad, 2.137 en zonas verdes y 74 en equipaciones municipales, que se calcula que permitirán absorber unas 262 toneladas más de CO₂ al año e interceptar más de 32,5 millones más de litros de lluvia, además de reducir los niveles de ozono, el dióxido de nitrógeno y el dióxido de sulfuro. La campaña incluye ejemplares que no se plantaron durante la fase de emergencia por sequía el último año.

Cobertura arbórea del 20% en 2030

El objetivo del equipo de gobierno es lograr el 20% de cobertura arbórea en la ciudad en 2030, según el Plan director del verde urbano de L’Hospitalet. Es decir, casi doblar los porcentajes actuales, ubicados en el 12,14%. “Somos conscientes de la carencia histórica de cobertura arbórea en la ciudad, especialmente en el ámbito del Samontà. Nuestro objetivo es que toda la ciudadanía disponga de un árbol a menos de cinco minutos de casa”, ha señalado Quirós. Los últimos años, se ha plantado en la ciudad una media de 900 árboles en cada campaña de plantación.

Operarios trasplantan un árbol en la calle Muntanya de L’Hospitalet AJ L’HOSPITALET

Más de 3.400 árboles

Se plantarán árboles en nuevas ubicaciones –aproximadamente unos 1.000–, algunas de ellas acordadas con el vecindario y entidades de los barrios. Además, se repondrá aquellos árboles que no han sobrevivido –más de 2.400 ejemplares–, la gran mayoría a consecuencia del estrés hídrico provocado por las altas temperaturas y las restricciones en el uso del agua durante la fase de emergencia de sequía.

Con todo, en esta campaña, se plantarán árboles de 81 especies diferentes, todas ellas adaptadas a las “condiciones climatológicas actuales”, es decir, que son árboles con necesidades bajas o muy bajas de agua.