Elisabet Ortega (Barcelona, 1982) desprende pasión por Sant Feliu. La líder del PP en el municipio, cuyos resultados electorales doblaron los obtenidos en 2019 y le otorgaron dos regidoras, compagina su carrera profesional con la política local, por la que muestra una auténtica vocación. La edil rehuye de los despachos, y mantiene con firmeza su apuesta por hacer política en la calle, lo que le permite conocer de primera mano las preocupaciones de sus vecinos y asumirlas como propias.
Con una especial inquietud por la falta de atención del gobierno municipal a la vía pública, y tras cuatro años en los que el binomio comunes-ERC ha dejado una mala herencia en la ciudad, Ortega se ha lanzado a liderar la oposición en Sant Feliu. Los años perdidos en materia de vivienda, los carriles bici perjudiciales para la movilidad y el nulo papel del municipio como capital de comarca, son algunas de las cuestiones que trata en una conversación con Metrópoli para analizar el estado de la ciudad.
Su partido, con usted al frente, logró doblar los resultados de 2019 en las elecciones municipales de 2023. ¿Qué papel juega el PP en Sant Feliu?
Estamos muy satisfechas con el resultado que obtuvimos en 2023. Recogimos el fruto del trabajo de los cuatro años anteriores, en los que estuvimos fuera del Ayuntamiento pero no de la política municipal. La política se hace en la calle. Lideramos la oposición, puesto que somos el único partido que presentamos una moción al mes recogiendo las inquietudes de vecinos, asociaciones y entidades. Vemos con tristeza que, aunque tengamos mociones aprobadas, el gobierno no les da seguimiento, por lo que en 2025 empezaremos a hacer un recopilatorio de todos sus incumplimientos para demostrar que los que proponemos mejoras en Sant Feliu somos nosotros.
El gobierno de coalición de comunes y ERC recibió duras críticas por su gestión durante el pasado mandato. ¿Cree que el Ejecutivo actual ha logrado romper con esta herencia?
No. Están haciendo una política continuista, dentro de lo que cabe, normal. Hay muchísimos documentos, contratos y licitaciones que se extienden más allá de una legislatura, por lo que están teniendo que hacer continuismo. Respecto a los presupuestos, la gran mayoría de capítulos de gasto vienen marcados por lo que tienes contratado, lo que deja un margen mínimo para hacer una política diferenciada a lo que es macropolítica dentro del Ayuntamiento. En la vía pública se plasma que sigue todo igual: las calles siguen sucias, tenemos problemas de iluminación y los parques infantiles están en mal estado. La política municipal es gestionar la calle en el día a día. Tenemos un gobierno atraído por los grandes proyectos, con muchas ganas de inaugurar edificios enormes, pero se olvidan del mal estado de la vía pública.
El soterramiento de las vías de Rodalies es una demanda histórica del municipio que, a día de hoy, se encuentra en ejecución. ¿Cree que ha habido una cierta dejadez municipal para acelerar esta obra?
Como Ayuntamiento, teníamos el poder que teníamos. He estado en los mandatos en los que teníamos que apretar, cada año había una moción para reclamar que incluyeran el soterramiento en los Presupuestos Generales del Estado. Vi que eso no funcionaba y me reuní con el presidente de la Comisión de Presupuestos, Antonio Gallego, para explicarle el proyecto. Él presentó una enmienda como grupo parlamentario del Partido Popular para que se volviera a calcular el precio que costaría la obra del soterramiento. La enmienda se aprobó, ese proyecto salió del cajón y se puso sobre la mesa. Cuando vino aquí Mariano Rajoy, en mitad de toda la escalada tensional con el independentismo, tenía que traer proyectos importantes a Catalunya. ¿Qué tenía sobre la mesa? El soterramiento de Sant Feliu. Las cosas son simples y llanas. Yo puse un granito de arena muy importante para que saliera del cajón y estuviera sobre la mesa. No ha habido dejadez, hemos trabajado todos con las armas que hemos tenido.
Elisabet Ortega durante la entrevista con Metrópoli
La vivienda es una de las grandes preocupaciones en Barcelona y su área metropolitana. ¿Cree que el Ejecutivo local trabaja suficiente para incrementar la oferta de vivienda social en Sant Feliu?
Para nada. Hemos perdido un mandato en el que no se ha hecho nada en materia de vivienda. Tenemos el plan de vivienda caducado y solares municipales a los que no se les está dando uso. No tenemos más vivienda que ofrecer ahora mismo. Faltan políticas, medios e, incluso, coordinación. Atiendo a muchas personas preocupadas porque no tienen piso y no pueden pagar un nuevo alquiler. Les envío a la Oficina Local de Vivienda, y la respuesta que me traen estos ciudadanos es pésima. Lo que siempre les dicen es que aquí no hay nada, que se busquen la vida y, como mucho, les dan una ayuda que les obliga, antes, a pagar un alquiler desorbitado. Esa respuesta no es lógica. Además, muchas personas sienten que el servicio no es transparente. En una reunión en la que pedí información oficial y veraz me dijeron que no había nada, y luego me enteré de que a tres o cuatro personas le habían facilitado vivienda. ¿Qué está pasando aquí?
¿Cómo valora la gestión de la movilidad por parte del actual gobierno municipal?
La movilidad está alterada por las obras del soterramiento, por lo que no podemos valorar una política estable ni a futuro porque ahora mismo vamos haciendo parches. Pero me quejo de que, en julio de 2023, presentamos una moción repetida del mandato anterior que no se ha aplicado para quitar varios carriles bici que son innecesarios e inseguros. Se aprobó esa moción, como se me aprobó en el mandato anterior otra favorable a quitar el carril de Marquès de Monistrol. Llevo desde verano del año pasado esperando a que el gobierno me llame para hablar del tema. No se ponen a trabajar en tres carriles que están en calles con mucha pendiente, que no se usan y provocan colapsos de tráfico. En la calle General Manso, tenemos dos carriles bici con una inclinación de más del 15%, y en el que algunos ciclistas no circulan porque es inseguro.
Un proyecto que está sobre la mesa es la extensión del tranvía hasta Molins de Rei ¿Es partidaria o detractora?
Soy partidaria de que tengamos tres paradas en Sant Feliu, pero no lo soy de que no se dejara, ni siquiera, decidir. Se gastó muchísimo dinero en un proceso de información y participación de la ciudadanía para ver qué hacíamos cuando nos quitaran las vías del tren, donde en ningún momento se dio la opción de no pasar las vías del tranvía por el municipio. Entiendo que la gente piense que es un problema quitar las vías del tren para poner las del tranvía, porque nadie explicó que no tiene nada que ver, que no pasa nada por tener unas vías de tranvía ahí. El ciudadano se sintió muy poco invitado a votar, la participación fue muy baja. El trazado no lo tenemos todavía definido, hay dudas sobre la tercera parada. Si no la tenemos, la ampliación a Molins no llegará. También hay que pensar en el beneficio/coste. ¿Vamos a tardar más de una hora desde Molins de Rei a Barcelona cuando un autobús exprés hace el recorrido en 25 minutos?
Tranvía en circulación
Los datos del Balance de Criminalidad del Ministerio del Interior indican que, en el segundo trimestre de 2024, se registraron 912 infracciones penales en Sant Feliu. ¿El municipio sufre un problema de inseguridad?
En los últimos balances han aumentado mucho las estafas informáticas, porque se han denunciado en Sant Feliu. No es una ciudad insegura. Eso no quita de que haya momentos, como en fiestas, en los que se pueda ver delitos más agresivos, como agresiones, robos con fuerza e incluso un aumento de las violaciones. Somos una pequeña isla de tranquilidad en comparación con otros municipios mucho más grandes de alrededor, pero hay trabajo por hacer. Hay que dar sensación de seguridad con dos medidas que va a llevar a cabo el gobierno y por las que nosotros también apostamos: la policía de barrio y la videovigilancia. Esta última la pedimos hace ya dos años por una oleada de robos que hubo en parkings públicos. Hay que revisar el trabajo con la policía, pero no daré un mensaje de alarmismo, de que Sant Feliu es inseguro, porque no es así.
Los municipios catalanes se han visto obligados a incorporar una nueva tasa de residuos en sus ordenanzas fiscales para 2025. ¿Considera adecuada la metodología utilizada por el gobierno municipal para calcular esta tasa?
No, estoy totalmente en contra. Llevan dos años diciéndonos que Europa nos obliga a que, a partir de ahora, el servicio se cubra totalmente con esta tasa. Después de trabajos dentro del PP a nivel nacional, sabemos que la normativa no obliga, recomienda. El gobierno socialista del Estado ha hecho una ley para que sea obligatoria, son quienes han decidido que el ciudadano pague íntegramente el servicio. Votamos en contra del sistema que implementarán en Sant Feliu porque propusieron bonificaciones por valor catastral de la vivienda. Defendí que se tenía que pagar en función de las personas empadronadas en una vivienda. Es una tasa de servicio, no un impuesto basado en que paga más quien más tiene. No se han recogido, tampoco, bonificaciones por reciclaje ni otras similares. La implementación de la tasa de residuos me parece aberrante.
¿Cómo ve los presupuestos aprobados por el gobierno de coalición de Sant Feliu para 2025?
No se preocupan de la gestión diaria de la ciudad. Son presupuestos muy a futuro, con unas inversiones genéricas. Me dijeron que era imposible estudiar la posibilidad de tener un cementerio de mascotas municipal, mientras que el gobierno quiere inaugurar pabellones, hospitales y parkings. Son proyectos muy grandes, que quizá no van a ver ni en este mandato ni en el siguiente, pero tener las calles limpias con una sopladora se les sale del presupuesto. Hay más de dos millones de euros en estudios y proyectos, pero no hay nada para mejorar la limpieza de las calles. Los socialistas piensan más en renovar la cocina, el baño y hacerse un bonito escaparate que no en reparar las fugas.
Sant Feliu cuenta con grandes empresas, como Almirall, Dallant y Saula, entre otras. ¿El municipio está aprovechando su potencial empresarial para impulsar su desarrollo?
Si lo están haciendo, no llega a la ciudadanía. Son empresas que están en el polígono, pero que no cuentan con ningún reconocimiento especial. No hay la sensación de que sean empresas de la ciudad. Si el gobierno se reúne con ellos o si hacen alguna actividad para ellos, a nosotros no nos llega como oposición ni como ciudadanos. De la Comisión de Promoción Económica tampoco llega nada. Es una comisión totalmente vacía de contenido. Sí quiero hacer mi reconocimiento a Sant Feliu Ciutat Viva, una cooperativa de negocios que, para mí, son quienes lo hacen bien. Son pequeños comercios de Sant Feliu que se reúnen en su hora de comer para organizar actividades y hacer promoción. Una cooperativa de comerciantes hace más trabajo por el comercio local que el Ayuntamiento.
La edil popular Elisabet Ortega durante la entrevista
En una entrevista para Metrópoli, la alcaldesa Lourdes Borrell afirmó que Sant Feliu comienza a ejercer como capital del Baix Llobregat. ¿Comparte esta afirmación?
Para nada. A modo de ejemplo, en el pleno de noviembre presentamos una moción para pedir un cementerio de mascotas. La respuesta del PSC fue que ya hay uno comarcal en Torrelles. Si como capital de comarca rechazas tener un equipamiento municipal alegando que ya hay uno comarcal, ¿qué capital quieres exigir ser? El gobierno municipal no está haciendo nada para que Sant Feliu sea reconocida como capital de comarca. Tenemos los equipamientos que nos han tocado, pero no tenemos capacidad de atracción económica. En el área metropolitana tampoco hay un liderazgo. Me da pena, pero muchas veces, cuando tengo que explicar dónde está San Feliu a gente de Barcelona ciudad, dicen que Molins de Rei y Sant Just le suenan, pero no Sant Feliu. Como capital de comarca, no somos el polo de grandes empresas ni equipamientos, la capitalidad ni se huele.
¿Se ve como candidata del PP en las elecciones de 2027?
No lo hemos pensado todavía, porque la asamblea local vendrá más adelante. Estamos afiliando a mucha gente nueva, con varios jóvenes ya integrados en la junta local. Yo estaría encantada de que hubiera una renovación. No pretendo enquistarme como líder del PP en Sant Feliu para siempre. Me encanta que entren nuevas ideas, nuevas personas y nuevas formas de hacer, pero ahora el debate no está sobre la mesa.
En caso de que finalmente lo fuera y contara con responsabilidades de gobierno tras los comicios, ¿qué cuestiones abordaría?
Lo primero sería tener Sant Feliu limpia y ordenada, en buen estado. Estaríamos en la calle todos los días. Si esto ya lo hacemos en la oposición, con 20 personas aprovechando su día a día, imagínate lo que podríamos hacer si tuviéramos gente dedicada solo a eso. Poder estar en las cosas del día a día es lo que está fallando. Veïns per Sant Feliu venía con ese lema, pero no se ha notado ninguna mejoría en el estado de la via pública. En Sant Feliu es difícil hacer oposición porque no hay una problemática acuciante de inseguridad o de okupas. Respecto a la coalición de gobierno, Veïns y Junts no están dejando su huella en la gestión diaria. Todo lo capitalizan los socialistas, para bien y para mal. El mercado sigue con paradas vacías, no se hace una buena gestión interna de los funcionarios municipales, no tenemos plan de igualdad y casi la mitad de los impuestos recaudados se destina a pagar la estructura del Ayuntamiento. No vemos ningún tipo de mejora sustancial en el municipio.