Los Mossos d'Esquadra han detenido a un padre y a su hija, de 61 y 31 años, respectivamente, por presuntamente cultivar 300 plantas de marihuana en su finca de Gavà, situada a escasos metros de la comisaría.
Según ha informado la policía catalana, la investigación comenzó en febrero, cuando los agentes tuvieron conocimiento de que dentro de la casa, que desprendía un fuerte olor a marihuana, había una posible plantación.
Los agentes establecieron varios dispositivos de vigilancia secreta y se dieron cuenta de que, aún y estar en pleno invierno, el aire acondicionado estaba constantemente activado.