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Una nueva forma de pasar el tiempo libre ha ido tomando fuerza en los últimos años. Los centros comerciales de la periferia de Barcelona han dejado de ser espacios de consumo esporádico para convertirse en los nuevos enclaves de ocio metropolitano, especialmente durante los fines de semana.

Gran parte de su atractivo radica en la posibilidad de disfrutar de diferentes servicios –cine, restauración, comercio y zonas al aire libre– en un mismo espacio, sin necesidad de desplazarse. Una opción especialmente interesante para familias o grupos de amigos que buscan comodidad, ocio y entretenimiento en un entorno accesible y multifuncional.

En este contexto, cinco centros de Barcelona y la metrópoli se han consolidado como referentes: Westfield La Maquinista, en Sant Andreu; Splau, en Cornellà; Gran Via 2, en L’Hospitalet; Màgic Badalona; y Ànecblau, en Castelldefels.

Centros de referencia

Westfield La Maquinista es el mayor centro comercial al aire libre de Catalunya. Fronterizo entre Sant Andreu de PalomarBon Pastor, cuenta con más de 200 tiendas y restaurantes. Ha actuado como catalizador urbanístico, transformando el barrio, mejorando la conectividad y atrayendo nuevos residentes y comercios.

Entrada al parking del centro comercial Westfield La Maquinista Westfield La Maquinista Barcelona

Splau, junto al estadio del RCD Espanyol en Cornellà, se ha consolidado como el destino de compras líder en el Baix Llobregat. Cuenta con más de 130 establecimientos en una superficie comercial de 54.500 metros cuadrados y con un aparcamiento gratuito con capacidad para 2.800 vehículos.

Destaca por su arquitectura de galerías abiertas, su cine de última generación y una renovada oferta gastronómica. Su presencia ha dinamizado una zona antes marcada por la actividad industrial, convirtiéndola en un polo de atracción para familias y jóvenes de la comarca.

En el primer semestre de 2025, el centro se ha renovado para responder a las demandas de los consumidores, con la llegada de nuevas marcas, la modernización de tiendas ya consolidadas y la apuesta por ofrecer una experiencia de compra más atractiva. Así, Splau refuerza su mix comercial y se consolida como un destino dinámico, con opciones para todos los gustos, estilos y presupuestos.

Ricard Doga, gerente de Splau, afirma: “Nuestro objetivo es seguir ofreciendo una experiencia única, cómoda y completa, con una oferta en constante evolución que responda a los intereses y necesidades de nuestros clientes”. Recientemente, el centro ha invertido en una campaña de identidad de marca en el Baix Llobregat y Barcelona, que refuerza la idea de que “el Splau es un punto de encuentro”, en palabras del mismo.

Centro comercial Splau de Cornellà de Llobregat Splau

Gran Via 2, en L’Hospitalet, se sitúa junto a la Fira de Barcelona y el distrito financiero de la plaza Europa. Con más de 180 tiendas, 20 restaurantes y un cine con tecnología 4DX y ScreenX, es uno de los centros más completos de la zona. Su impacto económico ha sido notable: miles de empleos y una nueva centralidad para un municipio en pleno crecimiento.

Además, su cercanía con Ikea lo convierte en una pieza clave dentro del eje comercial del área metropolitana, atrayendo a un gran volumen de visitantes tanto de L’Hospitalet como de municipios vecinos. Esta proximidad refuerza la complementariedad entre grandes superficies, consolidando la zona como un polo de atracción para el consumo, el ocio y el empleo.

Màgic Badalona, uno de los centros de referencia al norte del área metropolitana, ha contribuido a la transformación del barrio del Gorg. Su proximidad con el Pabellón Olímpico le da una fuerte identidad deportiva.

Mapa de la costa de Barcelona con diferentes centros comerciales de la metrópoli Metrópoli

Por último, Ànecblau, en Castelldefels, ha sabido capitalizar su cercanía a la playa para consolidarse como centro comercial y de ocio durante todo el año. Abierto los 365 días del año y con más de 120 tiendas, restauración renovada y cine, ha ayudado a desestacionalizar la economía local y diversificar la oferta más allá del turismo veraniego.

Modelo de socialización

Más allá de su papel económico, estos centros han redefinido la forma en que se vive el ocio en la periferia urbana. La programación de eventos culturales, campañas solidarias, actividades infantiles o zonas para desconectar han transformado estos espacios en puntos de encuentro comunitarios, donde el consumo convive con el bienestar.

Impacto social y urbano

El impacto de estos centros va más allá de lo comercial. Su apertura ha significado, en la mayoría de las ocasiones, la dinamización de la zona, antes terrenos industriales o abandonados. Su proyección ha atraído inversiones inmobiliarias, modernizado infraestructuras y dado una nueva vida a barrios de la periferia, como en el caso de Westfield La Maquinista.

En cierta forma, estos centros se han convertido en “microciudades” donde conviven comercio, cultura y comunidad, hoy espacios de encuentro y dinamización. Barcelona y su área metropolitana viven, así, una transformación donde el ocio y la vida cotidiana se reconfiguran en torno a estos nuevos epicentros de actividad urbana.