Susto con final feliz en L’Hospitalet de Llobregat. La noche del pasado jueves, 7 de agosto, la Guardia Urbana del municipio salvó la vida a un bebé de poco más de un año que se estaba ahogando.
Los agentes, que en esos momentos estaban patrullando la ciudad, fueron alertados por una mujer, que muy nerviosa les pidió ayuda porque su hijo no respiraba.
Rápidamente, los agentes evaluaron el estado del pequeño y movilizaron al bebé para facilitar la respiración, consiguiendo que el niño reaccionara positivamente. Los hechos ocurrieron en la avenida de la Isabel la Católica.
Un agente de la Guardia Urbana de L’Hospitalet socorriendo a un bebé que no podía respirar
Hospitalizado pero fuera de peligro
Las patrullas disponen de DEA (desfibrilador externo automático) y los agentes han recibido formación actualizada que les habilita para la utilización de este dispositivo en casos de emergencia vital.
Disponer de un recurso propio como la ambulancia de la Guardia Urbana es clave en situaciones de urgencia. Gracias a su rápida actuación, el bebé fue estabilizado en el lugar y trasladado con seguridad al Hospital Sant Joan de Déu junto con su madre.