Un total de 2.530 vecinos del barrio de la Teixonera de Barcelona han presentado de forma conjuntan alegaciones al plan urbanístico que, en el marco de la proyectada cobertura de la ronda de Dalt en ese tramo, hará desaparecer la plaza Vall d'Hebron.
El pasado junio se aprobó la modificación del Plan General Metropolitano para la reordenación de sectores del barrio de la Teixonera y el entorno de la llamada Llosa de la Vall d'Hebron, que afecta a unos 73.056 metros cuadrados.
Objetivo del plan urbanístico
La reforma busca, según el Ayuntamiento, "integrar" mejor a la Teixonera en su entorno, generar nuevos espacio libres y equipamientos, construir parte de ellos en la llamada Llosa de la Vall d'Hebron, y generar un nuevo modelo de conexión vial.
Esta modificación se enmarca en el proyecto de cobertura de la ronda de Dalt y la creación de una nueva salida de emergencias desde los viales, cuya creación supondrá la eliminación de, aproximadamente, media plaza de la Vall d'Hebron.
Zonas verdes
El Ayuntamiento sostiene que la parte de zona verde que se perderá con esa obra, para la que ya se han empezado a talar árboles en la citada plaza, se suplirá con la generación de nuevos espacios en la cubierta de la ronda, argumento que los vecinos rechazan en sus alegaciones.
"No vale el argumento de que se gana el espacio de la cobertura de la Ronda, porque uno de ellos ya está y su uso es residual-puntual y el otro será muy similar. Ninguno de ellos es comparable en calidad, seguridad y estima a lo que el Ayuntamiento pretende arrebatar", dicen en las alegaciones.
Construcción de edificios
La modificación del Plan General Metropolitano (PGM) implica también la recalificación de suelo para la construcción de ocho nuevos edificios en un área aproximada de 1,8 hectáreas, un proyecto, dicen los vecinos, que "solo contribuirá a la masificación y al deterioro de la calidad de vida del barrio".
En las alegaciones, los firmantes subrayan que "la Teixonera es un barrio densamente poblado, con una densidad de 345 personas por hectárea, una de las más altas de Barcelona", y que la construcción de los pisos proyectados implicará, además, intensificar el tráfico "durante y después de las obras", lo que supone "un riesgo considerable para los peatones y ciclistas con la aplicación exclusiva de cemento y no de zonas verdes para dejar respirar a la ciudadanía".
José Antonio Molina, uno de los firmantes de las alegaciones y portavoz de los vecinos, explica a la agencia EFE que, según la memoria municipal, las obras afectarán a 39 vecinos y supondrán la creación de 216 nuevas viviendas destinadas al mercado libre excepto "las 39 que se destinarán a los afectados con derecho a realojo". "Lo que ahora es verde pasa a edificable", apostilla.
Oficinas municipales
"De todos los desarrollos previstos, el edificio municipal proyectado en la calle Coll i Alentorn es especialmente preocupante. Con una fachada de 73 metros de longitud y una altura de casi 30 metros, esta construcción imponente tiene un impacto contra la escala del entorno urbano existente", se expresa en el documento de alegación.
Por todo ello, los vecinos piden que se abandone "la idea de construir en la actual plaza Vall d’Hebron y parte del paseo, respetando la actual calificación de zona verde en su parte consolidada".
Ejemplo de lucha vecinal
Molina recuerda que esta es la tercera vez que los vecinos de La Teixonera defienden la permanencia de la plaza del Vall d'Hebron, la primera vez en 1993 contra un proyecto que afectaba a ese espacio por la intención del Ayuntamiento de edificar en los márgenes de la Ronda de Dalt.