Sorpresa en Barcelona. Barcelona en Comú, la formación que lidera Ada Colau, pierde ocho puntos respecto a 2015 y pasará a ser la cuarta fuerza en el Ayuntamiento de la capital catalana, según una encuesta de la empresa de demoscopa Time Consultant para Crónica Global. ERC, con un 21% de los votos, será el partido más votado, seguido por el PDeCAT (17,7%) y Ciudatans (17,5%). Los comunes obtendrán el 17,3% de los sufragios.
Los ciudadanos de Barcelona castigarán a Colau. La gestión de los comunes pierde muchos adeptos y la intención de voto para la formación violeta cae en picado. Del 25,2% de 2015 pasará al 17,3% previsto para junio de 2019. Su fracaso en las políticas de vivienda y movilidad penaliza al gobierno actual
La encuesta confirma la victoria de ERC. El último Barómetro de la ciudad que presentó el primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello, ya auguraba que la formación republicana era la preferida de los barceloneses. El pasado enero, el partido de Alfred Bosch superaba por escaso margen a Barcelona en Comú. En los últimos meses, la brecha es de 3,7 puntos.
CIUTADANS SUBE, PERO SIGUE COMO TERCERA FUERZA
El PDeCAT resiste como segunda formación, aunque pasa del 22,8% de los votos de 2015 al 17,7% de 2019. Ciutadans, en cambio, sube 6,5 puntos y se mantiene en tercera posición. El partido naranja, sin embargo, no rentabiliza su victoria en las pasadas elecciones autonómicas ni el efecto Manuel Valls.
El PSC y la CUP también mejoran sus resultados. Los socialistas obtendrán el 13,3% de los votos y los antisistema lograrán le 8,1% de los votos. El PP, en cambio, pierde seis puntos, del 8,7% actual al 2,7% previsto para dentro de un año. En Barcelona, el voto útil del electorado unionista va para Ciudadanos.
Resultados de la encuesta para 'Crónica Global' de las elecciones municipales de 2019
El futuro de Barcelona está en juego y la campaña electoral para las municipales de 2019 se prevé tensa y muy disputada. El control de la ciudad es muy importante para las principales formaciones políticas en plena crispación por el encaje de Catalunya en España. La encuesta, de momento, confirma que el electorado castigará la gestión de Colau. También puede apreciarse una importante fragmentación del voto.