El independentismo más radical ha tenido su cuota de protagonismo en la Diada. Este martes, simpatizantes de Arran (la rama juvenil de la CIP) han lanzado botes de humo y pintura de varios colores al edificio de la Jefatura de Policía, en la Via Laietana, y han quemado una pancarta con los rostros de los miembros de la Manada en la plaza de la Catedral.
La manifestación de la izquierda radical de este martes por la mañana ha contado con la presencia de muchos simpatizantes de Arran. En la misma se ha pedido la libertad de los líderes independentistas encarcelados y se han realizado proclamas contra las fuerzas policiales.
PANCARTA CONTRA LA MANADA
El momento más tenso se ha producido cuando los manifestantes pasaban por delante de la Jefatura de la Policía, en la Via Laietana. Entonces se han oído gritos como “este edificio será una biblioteca” y se han lanzado botes de humo y pintura. Un cordón de seguridad de los Mossos d'Esquadra custodiaba el edificio.
En las inmediaciones de la Catedral de Barcelona, los manifestantes han prendido fuego a una pancarta con los rostros de los investigados por una presunta agresión sexual en los Sanfermines de 2016 con el lema “Ninguna agresión sin respuesta”.
EL AUGE DE LA EXTREMA DERECHA
La marcha ha finalizado en la plaza Comercial, junto al Born, donde se han realizado los protocolarios discursos. En los mismos, la izquierda radical ha puesto especial énfasis en el auge de los movimientos de extrema derecha en toda Europa.
Vidal Aragonés, diputado de la CUP, ha manifestado que “el régimen del 78 nunca va a permitir que el pueblo de Catalunya pueda hacer un referéndum en el que se pueda ejercer auténticamente el derecho a la autodeterminación”.