El Ayuntamiento de Barcelona quiere cambiarle la cara a una de sus más históricas vías: la avenida Paral·lel. Para ello, su Comisión de Govern ha aprobado -inicialmente- un plan de usos que busca garantizar un equilibrio entre un uso comercial, que evite la gentrificación y fomente el comercio local, y un uso vecinal, que proteja el entorno urbano y la convivencia ciudadana.
En rueda de prensa celebrada este lunes, la teniente de alcalde de Ecología, Urbanismo y Movilidad de Barcelona, Janet Sanz, ha defendido que este documento busca la implantación de actividades económicas y comerciales diferenciadas, que evite "el monocultivo de usos de la restauración y el ocio nocturno" y favorecer la continuidad de los vecinos que residen en esta avenida (conocida internacionalmente como El Paralelo), que ha definido como "singular y un referente para la ciudad".
EJE CONECTOR DE BARRIOS
Sanz ha explicado que durante este año han analizado y diagnosticado la actividad de la avenida del Paral·lel, donde uno de cada tres locales se dedica a una actividad de concurrencia pública -un total de 107 locales- y un 91,59% de los mismos están destinados a la restauración, que se concentran en el tramo central, entre las calles Parlament, Blai y Nou de la Rambla.
Por su parte, la concejala del distrito Sants-Montjuïc, Laura Pérez, ha recordado que hace un año se anunció la suspensión de las licencias en esta avenida y que ahora han aprobado este plan para convertirlo en un "eje conector entre los barrios de Sant Antoni, Poble Sec y Ciutat Vella", que los conecte de manera transversal.
PROHIBIDO 'ESTABLECERSE'
Como novedad, el plan establece que no se podrá implantar ningún establecimiento en locales contiguos a viviendas e introduce distancia, densidad y superficie para ordenar los comercios, entre las que Sanz ha destacado el cambio de 200 a 100 metros la distancia mínima entre establecimientos de exhibiciones y espectáculos.
En este sentido, el plan tiene también como objetivo potenciar la actividad cultural, por lo que aplicará condiciones diferentes a la zona de la avenida que concentra la mayor parte de las actividades culturales, entre las calles de Viladomat, Margarit y Cabanes, donde se ubican locales teatrales y musicales.