El director general de Cementiris de Barcelona, Jordi Valmaña, presionó en 2017 a los trabajadores de la empresa municipal con no abordar la correción de la diferente escala salarial existente en Cementeris ante la falta de un "apoyo explícito" del comité de empresa a la funeraria municipal que quiere impulsar el gobierno de Ada Colau y que este miércoles ha quedado vista para sentencia tras la negativa de la mayoría de la oposición a avalar el proyecto.
En una reunión que tuvo lugar el 30 de mayo de 2017 en la sede de Cementiris de Barcelona entre la dirección y el comité de empresa, uno de los temas que los representantes de los empleados pusieron sobre la mesa fue saber si la empresa iba a corregir la diferente escala salarial que existía entre los trabajadores de Cementiris. Según consta en el acta de la reunión, a la que ha tenido acceso Metrópoli Abierta, Valmaña dijo que no era "un buen momento por negociar este asunto". El director general alegó para no entomar la cuestión que "los últimos acontecimientos y la falta de acuerdo en otros temas, como recibir un apoyo explícito por parte del comité ante el proyecto de nueva política de funeraria municipal, no facilitan abrir una vía de negociación".
LIMITACIONES PRESUPUESTARIAS
Además de las citadas mejoras salariales propuestas por los empleados, el comité también planteó si se podía reducir el tiempo para que una persona pasase a ser trabajador indefinido. Sobre esta materia, Valmaña comentó que, aunque la voluntad de la empresa era siempre alcanzar ese punto, solo se podía hacer "dando cumplimiento a las limitaciones indicadas por la Ley de los Presupuestos Generales del Estado (PGE)".
Sobre la posibilidad de reducir la contratación a través de ETT a favor de contrataciones directas hechas por Cementiris de Barcelona, el director general respondió que este tipo de contratación también venía limitada por los PGE y añadió que era una modalidad que se utilizaba para ofrecer un servicio correcto cuando se producían cargas de trabajo. Según Valmaña, la directiva interna establece "que estos contratos no se prolonguen más de 15 meses", consta en el acta.
A la citada reunión asistieron por parte de la dirección de la empresa, además de Valmaña, Ángel Pascual, Juan Manuel Aparicio y Eduard Fernández, mientras que por los representantes de los trabajadores acudieron a la cita Immaculada Artacho, Aitor López-Cano, Serafín Enciso, José Enciso, Ricardo Lahoz, Pablo D. García y Martín Martín.
HUNDIMIENTO DE 144 NICHOS
Como director general de Cementiris, Valmaña fue el máximo responsable del hundimiento de 144 nichos en el cementerio de Montjuïc que afectó a unos 350 cadáveres. Un año y medio después, la crisis está lejos de estar resuelta y todavía hay decenas de cadáveres sin identificar. Unas 60 familias representadas por los abogados Miguel Duran y Josep Maria de Palacio se querellaron contra el regidor Eloi Badia, máximo impulsor de la funeraria pública, y Valmaña por los delitos de daños, profanación, falsedad documental, prevaricación y malversación. Tras la negativa del juez a admitir la querella a trámite, las familias han presentado un recurso.
El pleno extraordinario celebrado este miércoles ha puesto el punto y final a la funeraria de Colau, al menos para este mandato. Al proyecto se han opuesto PSC, PDeCAT, PP y Ciutadans, mientras que ERC se ha abstenido. La iniciativa solo ha contado con los votos a favor de los comuns, CUP y los regidores no adscritos, Gerard Ardanuy y Juanjo Puigcorbé, 16 de los 41 concejales del pleno.