Las propuestas económicas serán el plato fuerte de la campaña electoral del socialista Jaume Collboni para recuperar a un electorado que en las últimas elecciones municipales le resultó esquivo y se le fugó hacia las filas de Ciudadanos y, sobre todo, de los comunes. Los socialistas consideran que la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, no puede presentar agenda política importante por una labor de gobierno muy pobre durante la legislatura y por eso darán la batalla apostando por acontecimientos internacionales y de apertura al futuro que los comunes han despreciado siempre porque afirman que no se corresponde con el modelo de desarrollo que quieren.
En un acto celebrado esta semana en el Círculo Ecuestre, Collboni expuso algunos de los puntos de esas propuestas económicas, calcadas del espíritu de las grandes propuestas que, en sus tiempos, había hecho Pasqual Maragall.
LA EXPOSICIÓN UNIVERSAL DE 2030
Así nació la idea de proponer a Barcelona como la sede de la Exposición Universal del 2030. “Se trata de posicionar a la ciudad en la agenda 2030, afrontando el reto de la transformación digital y aprovechando para modernizarla”, explican a Metrópoli Abierta fuentes del PSC.
Collboni se adelantó a todos sus rivales al proponer ese acontecimiento porque coincide con dos fechas importantes: en primer lugar, serviría para conmemorar el centenario de la gran Exposición Universal de 1929, que marcó un hito en la historia de Barcelona. Por otro lado, trata de sacar partido al hecho de que 195 países celebran las cumbres mundiales de la agenda 2030 y Barcelona podría convertirse en la ciudad anfitriona para acoger las reuniones de la misma, que sería el mayor acontecimiento internacional en lo que va de siglo.
SIGUIENDO A MARAGALL
Esta estrategia es similar a la que había aplicado el socialista Pasqual Maragall hace treinta años. El paralelismo de las propuestas de Collboni con las de su antecesor Maragall es sencillo: Barcelona aprovechó los JJOO del 92 para remodelar parte del frente marítimo y abrir la ciudad al mar, cosa que nunca había pasado. Lo que se hizo era impensable hasta ese momento: se derribó todo un barrio de la ciudad y se levantó otro barrio nuevo, con nuevas viviendas y nuevas equitaciones, además de recuperar las playas. Con motivo del Fòrum de las Culturas del 2004, se aprovechó para terminar de remodelar otra parte de Poblenou y toda la línea marítima en el extremo norte, con la urbanización de Diagonal Mar.
Según las fuentes consultadas, ahora Barcelona tiene otros retos tan importantes como esos: por una parte, es preciso transformar 70 hectáreas en el polo norte del barrio del 22@. La Exposición serviría para impulsar esa zona como el gran pulmón tecnológico de la capital de Cataluña pero también serviría para “volver a construir vivienda social”. En definitiva, se matarían dos pájaros de un tiro, ya que al mismo tiempo que se situaría a Barcelona en la vanguardia de las smart cities se cumpliría una de las obsesiones de la izquierda barcelonesa, la de apostar por la creación de vivienda asequible a las clases populares.
RENOVACIÓN DE PALACIOS FERIALES
Pero también hay otro polo de desarrollo que se ha de potenciar con motivo del acontecimiento de la exposición: acometer la remodelación de los palacios feriales de Montjuïc, cuya modernización fue paralizada por el gobierno de Ada Colau.
“Necesitamos transformar la parte de de Fira de Barcelona de Montjuïc, que en la actualidad tiene poca actividad pero que necesita mucha inversión”, subrayan las fuentes. Se trata, concretamente, de los palacios de Carles III y de Victoria Eugenia, en los que “sólo se guardan las carrozas de los Reyes cuando va a haber los desfiles. De hecho, en anteriores legislaturas se había comenzado a renovar las instalaciones, pero llegó Colau y quedaron paralizadas todas las inversiones”.
MODERNIZACIÓN DE LOS RECINTOS
Con la modernización de estos recintos, podrían volver a celebrarse algunos certámenes en ellas. “Se potenciaría el polo expositivo, que conllevaría también el desarrollo del polo económico de la zona, lo que resultaría beneficioso para la ciudad”, enfatizan desde las filas socialistas.
“Hasta ahora, Colau ha estado mirando para otro lado, pero nosotros hemos estado trabajando en cómo recuperar la ciudad y volver a situar a Barcelona en el mapa de las ciudades modernas y atractivas. Jaume Collboni ha estado picando piedra durante los últimos años y las ideas con que concurrimos a las elecciones representan dinamizar de nuevo la ciudad”, aseguran desde las filas socialistas.