Arranca la política de pactos en Barcelona. El candidato de ERC y ganador de las elecciones municipales, Ernest Maragall, ya se ve como alcalde, y quiere contar con el apoyo de JxCAT y BComú para gobernar. Así lo ha expresado este lunes en rueda de prensa, donde también ha descartado un escenario de acuerdos que le dejen fuera de la alcaldía.
Y es que el PSC ya ha inciado los primeros movimientos para tejer una alianza que evite que Barcelona tenga "un alcalde independentista". El mismo pasaría por un pacto a tres entre Colau, Collboni y Valls, algo que Maragall ha tildado de "inverosímil" y "contradictorio".
APOYOS PUNTUALES
Según él, lo ideal sería un gobierno de mayoría absoluta entre ERC, JxCAT y BComú, aunque ha matizado que es imposible por la falta de entendimiento y autoexclusión de los exconvergentes y el partido de Colau.
Así, Maragall cree que gobernará en solitario pero con los apoyos puntuales tanto de JxCAT como de los comunes, sus socios prioritarios de cara al mandato. En cambio, descarta cualquier tipo de acuerdo con el PSC, al que ha acusado de ser cómplice de la "represión" del Estado contra Catalunya.
Asimismo, ha restado importancia al hecho de salir elegido en primera o segunda vuelta, pues no contempla pactos alternativos que sumen mayoría absoluta. "Es una aritmética que en números da pero en política no", ha dicho sobre un acuerdo entre BComú, PSC y Cs, que juntos sumarían 25 concejales --cuatro por encima de la mayoría absoluta--.