El Ayuntamiento de Barcelona tenía el 24 de marzo 78 casos positivos en coronavirus, de los que 64 eran agentes de la Guardia Urbana, según figura en un documento interno al que ha tenido acceso Metrópoli Abierta. El cuerpo de bomberos es el segundo departamento municipal con más enfermos, cuatro, aunque la diferencia respecto a la policía local es enorme. En principio los policías diagnosticados eran 65, pero las pruebas a uno de ellos han dado negativo.
El informe diferencia entre los casos que han dado positivo -muchos de ellos por diagnóstico clínico, es decir sin realizar la oportuna prueba-, los sospechosos y las personas que están confinadas. En la Guardia Urbana, hay 389 policías aislados, mientras que en bomberos hay 84. El servicio de extinción de incendios también cuenta con 10 casos sospechosos. En este apartado no hay ningún guardia urbano.
Del documento municipal también destaca que entre los trabajadores de servicios sociales hay un caso confirmado, 29 de sospechosos y 78 personas confinadas. Estas cantidades no coinciden con las publicadas el día 25 en Twitter por el sindicato UGT, que cifró en 17 los enfermos en la plantilla de servicios sociales. UGT denuncia que estos trabajadores solo tienen una mascarilla de papel para pasar una semana.
423 POLICÍAS
Metrópoli Abierta se ha dirigido a la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) para saber por qué hay tantos agentes afectados por el Covid-19. Entre aislados y confirmados hay 453 agentes, 389 en casa y los 64 positivos. Según el agente y secretario de Organización de CSIF, Eugenio Zambrano, el elevado número de casos, en una plantilla de 3.000 personas, se debe a la alta exposición de los policías en la vía pública, a la falta de material de protección y a unos criterios y protocolos muy tardíos dictados por la administración.
De hecho, en el documento con los trabajadores municipales afectados por coronavirus queda claro que los colectivos con más enfermos, casos aislados y gente sospechosa de tener el virus son los que trabajan en la calle. A la Guardia Urbana, bomberos y servicios sociales, hay que sumar el personal de Parques y Jardines, con un positivo, tres sospechosos y 16 empleados confinados.
USAR LAS MASCARILLAS EN LAS COMISARÍAS
Desde CSIF se critica que no todos los agentes disponen de los suficientes Equipos de Protección Individual (EPI) y que las mascarillas que utilizan no son las recomendables. "Durante días, el Ayuntamiento prohibió a los agentes usar las mascarillas en la calle bajo la amenaza de abrirles un expediente. Ahora, los criterios han cambiado y es el guardia quién decide cuándo se pone la mascarilla". El uso está recomendado no solo en las actuaciones en la vía pública sino también en el coche patrulla o en las comisarías.
El sindicato defiende la necesidad de que las pruebas rápidas se hagan antes a los agentes que están en activo que a los que se encuentran aislados. "De esta forma, los policías que estén sanos podrán seguir trabajando, y los que den positivo se podrán confinar. Los que están aislados ya no pueden contagiar mientras que en la calle puede haber agentes con el virus que estén asintomáticos", sostiene Zambrano.
El documento indica que hay tres casos sospechosos en el ámbito político. En las últimas semanas, varios regidores, entre ellos Jaume Collboni y la propia alcaldesa Ada Colau, han estado confinados en casa por haber estado en contacto con algún positivo. Ninguno de los dos ha desarrollado la enfermedad.