La regidora de Barcelona pel Canvi, Eva Parera, ha logrado que el gobierno de Ada Colau acepte cambiar los "subjetivos" criterios de admisión de las iniciativas y proposiciones que los grupos municipales presentan en las comisiones municipales y elabore un "reglamento claro" con el consenso de todas las formaciones. Para Parera, los rechazos de las propuestas pueden suponer una "censura encubierta".
"Se trata de una cuestión de orden, de funcionamiento. En la comisión de Economía me quejé de que los criterios de admisión de las iniciativas no estaban claros y quedaban sujetos a la subjetividad de la mesa. Muchos de los grupos no estamos representados y nos tumban muchas de las propuestas que presentamos", explica en conversación con Metrópoli Abierta.
TUMBADA UNA PROPOSICIÓN PARA JÓVENES Y VIVIENDA
En las comisiones celebradas la pasada semana, a Barcelona pel Canvi, el partido que lidera Manuel Valls, le rechazaron cuatro iniciativas. "A los demás grupos también les pasa", denuncia la edil. El tema no es menor, porque si el tema no es admitido, no se puede debatir ni ser votado. "He pedido que se establezca un reglamento claro con todos los grupos para determinar los criterios de admisión y el gobierno lo ha aceptado", explica.
La gota que colmó el vaso fue el rechazo de una iniciativa para establecer un plan de ayudas a los jóvenes para la compra de una vivienda. "Argumentaron que se tenía que presentar en la comisión de Derechos Sociales y no en la de Economía", añade la edil, número cuatro en la lista que Valls encabezó en las municipales del año pasado. Finalmente, la propuesta para los jóvenes se presentará en el pleno de este viernes.