La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha exigido a Aigües de Barcelona (Agbar) prorratear el consumo en cada hogar y no hacer una lectura estimada que, según la primera edil, ha hecho que el precio del agua aumentase en una cantidad tan elevada (entre 100 y 300 euros) durante la época de confinamiento y que se ha cobrado a partir de este verano.
Por este motivo, el Área Metropolitana de Barcelona (AMB), que lidera actualmente la propia Colau, impulsará un decreto a nivel metropolitano en el que exigirá que la empresa mixta devuelva dicho sobrecoste, un hecho del que ella ha vuelto a culpar a la compañía.
UNA OBSESIÓN PERSISTENTE
Además, en un nuevo episodio de la guerra del agua, la líder de Barcelona en Comú en el Ayuntamiento de Barcelona ha afirmado que “esto no hubiese pasado si este servicio estuviese gestionado por una empresa municipal”. Por todo ello, en una entrevista hecha en el programa Els Matins de TV3, ha vuelto a pedir la municipalización de dicho servicio.
En este sentido, la presidenta del ente metropolitano ha explicado que, en caso de que no entrasen de oficio contra la firma de titularidad mixta, “los más perjudicados serían los ciudadanos más vulnerables”.
ACLARACIÓN DE AGBAR
Cabe recordar que el Síndic de Greuges está "estudiando" la subida de la factura del agua puesto en marcha recientemente por el AMB tras las "numerosas quejas y consultas" que ha recibido. En un comunicado, el síndic, Rafael Ribó, ha afirmado que a partir de un "primer análisis de los hechos", se ha detectado que las empresas subministradoras del agua no hacían una lectura de los contadores durante el estado de alarma e hicieron una estimación del consumo "que no se adaptó a la situación real".
Cabe recordar que Aïgues de Barcelona ha salido al paso este miércoles y ha aclarado que en los casos en los que se haya facturado más agua de la consumida real se realizará un reembolso a sus clientes. Cuánto mayor es el consumo más caro resulta el servicio como las tasas asociadas, por lo que algunas familias han recibido giros de hasta 300 euros.
LA TASA DE RESIDUOS SE QUEDA
Colau también ha hablado sobre la polémica tasa de residuos, que dependiendo del hogar, carga entre unos 4,50 y 8,50 euros de más en la factura del agua a los barceloneses. La alcaldesa considera que se trata de una "tasa necesaria" y ha agregado que "es la forma más equitativa para saber el gasto en residuos de cada hogar".
"Esta tasa ha venido para quedarse. No hay marcha atrás", ha asegurado la primera edil. "Ahora era el momento de promoverla puesto que íbamos tarde", ha incidido cuando Heredia le ha cuestionado por el hecho de que una parte importante de la oposición hubiese cargado contra esta decisión.